Luego del sismo de 8.2 grados que se registró la noche de este jueves, edificios antiguos, como las casonas del centro histórico de Puebla, las zonas de San Andrés y San Pedro Cholula, así como Cuautlancingo, deben revisarse por la seguridad de la gente.
Así lo consideró Hugo Ferrer Toledo, Decano de Ingenierías de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), quien señaló que el fenómeno telúrico de este 7 de septiembre se originó en la zona de las costas del pacífico, a 19 kilómetros de profundidad, debido a los movimientos de las placas de Norteamérica y del Caribe.
Los “sismos que se registran en esa zona no se perciben tanto en el centro del país porque, debido al ángulo que tienen de incidencia, las ondas se atenúan de manera más rápida que si estuvieran en línea vertical”, comentó.
Asimismo, explicó que el daño que causan los sismos también dependen de los sitios en donde se registran, es decir, por las condiciones locales del suelo, además de las de las instalaciones, pues un edificio nuevo no tendrá más afectaciones que daños en acabados y recubrimientos.
Destacó que en el caso de la Upaep, las alertas sísmicas que están instaladas en la institución funcionaron correctamente.
Editado por: Guadalupe de la Rosa
