Terminó el registro de quienes aspiran a la candidatura a la gubernatura por Morena, a diferencia del proceso nacional, en el local, no fue un requisito la renuncia a los cargos de los aspirantes; sin embargo, la mayoría lo hicieron.
El senador Alejandro Armenta y el coordinador de diputados en el Congreso de la Unión, Ignacio Mier Velazco, no presentaron sus renuncias, el primero para no meter presión a otros aspirantes y el segundo porque tiene en sus manos uno de los temas más importantes de fin de años que es el presupuesto 2024 y que ha ido logrando consensos.
La situación de ambos es distinta, pues en sus cargos no tienen una estructura que pueda ser utilizada con fines electorales.
Quien tampoco presentó su renuncia fue la alcaldesa de San Martín Texmelucan, Norma Layón, quien trata de “chiflar y comer pinole”. El mismo día que anunció su registro también estaba cesando a su director de seguridad; después de casi dos años se dio cuenta que había corrupción en la corporación y nombró al sustituto.
En el ayuntamiento, maneja recursos y una estructura que podría ser utilizada con fines electorales y para evitar sospechas lo más sano hubiera sido que presentará su renuncia al cargo.
Quienes sí lo hicieron, justamente por la estructura con la que se cuenta en las dependencias y para evitar sospechas, fueron el delegado de los programas para el Bienestar, Rodrigo Abdala y la secretaria del Bienestar, Lizeth Sánchez.
Además de Julio Huerta, Olivia Salomón y José Antonio Martínez; quienes aspiran a la gubernatura deben dar un mensaje a la ciudadanía sobre el uso adecuado de los recursos y que no se repetirán las practicas del pasado.
