Editorial Ángulo 7
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La efectividad de las Policías Municipales en Puebla como primeros respondientes, el mejoramiento de sus condiciones laborales y que la ciudadanía confíe en que actuarán con respeto a los derechos humanos son responsabilidades permanentes de los alcaldes; por su parte, el gobierno estatal los apoya con patrullas y capacitaciones.

Este miércoles, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina reiteró su llamado para que los alcaldes garanticen que todos los uniformados de su respectivos municipios obtengan el Certificado Único Policial (CUP) y que refuercen el combate a la inseguridad para que los ciudadanos confíen en ellos.

Lo anterior, en Tepeaca, donde refirió que, en seis meses, su administración ha entregado más de mil patrullas a corporaciones municipales, las cuales sólo pueden ser usadas por elementos certificados, y adelantó que el próximo lunes también se entregarán armas a estas corporaciones, con la misma condición para su uso.

Ahora bien, aunque el estado ofrece apoyo en capacitación y equipamiento, los ayuntamientos tienen que trabajar para que estos recursos se traduzcan en una garantía de seguridad para la población.

En este sentido, los alcaldes y sus secretarios de Seguridad deben vigilar que los uniformados se conduzcan con apego a la ley y los derechos humanos, sin incurrir en abusos, así como que empleen adecuadamente las armas y patrullas que se les proporcionan.

En este sentido, las autoridades tienen que prevenir casos de abuso policial como el intento de detención de un universitario en su escuela por parte de policías de Puebla capital, tras reclamarles por inspeccionar a un estudiante de secundaria, así como la agresión a una policía de San Andrés Cholula por parte de un hombre ebrio, sin que recibiera respaldo inmediato de sus compañeros.

Si bien el CUP es una herramienta para evitar que las corporaciones municipales sean infiltradas por criminales, también se ha utilizado en el pasado como instrumento de amenaza y “limpieza” de elementos no gratos para mandos policiales, sin importar el buen desempeño policial, por lo que esta vieja práctica también se debe erradicar.

Y, por supuesto, otro pendiente los constituyen las mejoras salariales y de condiciones para el trabajo de los policías. En este aspecto, hay estrategias prometedoras, como el programa piloto para reducir a 16 horas la jornada laboral de los elementos en la Policía de Puebla capital.

Puebla, en línea con política nacional

La estrategia estatal de apoyo para la certificación de policías municipales –hay que señalarlo– se alinea con la política nacional para impulsar este procedimiento desde el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp).

Lo anterior, para dar cumplimiento al acuerdo tomado desde 2016 por el Consejo Nacional de Seguridad Pública para certificar a todos los elementos de segurida pública a más tardar en 2019, a fin de dar cumplimiento al artículo 96 de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública. 

“Las instituciones policiales contratarán únicamente al personal que cuente con el requisito de certificación expedido por su centro de control de confianza”, establece dicho ordenamiento.

Sin embargo, por acuerdo de la Comisión Permanente de Certificación y Acreditación del Consejo Nacional de Seguridad Pública, emitido en julio de 2021, se eliminó la fecha límite para las corporaciones estatales y municipales, mientras que, para la Guardia Nacional, se fijó un plazo al 31 de mayo de 2024.

En el caso de Puebla, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) reportó, en marzo pasado, que más del 90 por centro de los 7 mil elementos municipales en Puebla habían realizado el examen de control de confianza, que es el requisito fundamental para obtener el CUP a través del Centro Único de Evaluación y Control de Confianza.

Como se ve, la estrategia de certificación de policías municipales avanza, pero sólo tendrá un impacto real en la seguridad de la población y la mejora de las corporaciones si los ayuntamientos asumen su responsabilidad de mantener supervisados a sus policías.

LPR

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