Editorial Ángulo 7
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Ante la falta de capacitación a guardias y protocolos de seguridad homologados, los centros comerciales de Puebla y la zona metropolitana, como los de la Ciudad de México, se volvieron lugares muy atractivos para los delincuentes, pues detectaron que pueden asaltar y robar con impunidad, lo cual obliga a ciudadanos a extremar precauciones y debería poner en alerta a las autoridades municipales.

Tan sólo la semana pasada, Ángulo 7 dio cuenta del caso de una joven universitaria a quien un hombre le arrebató su celular, por la tarde del 24 de junio, cuando se dirigía hacia la tienda Sears del centro comercial Parque Puebla, ubicado al norte de la capital, y el personal de seguridad nada hizo para auxiliarla y detener al sujeto.

Aunque algunos dirán que es un hecho aislado, este 2023 ya se han reportado varios robos contra clientes y locatarios de centros comerciales. En mayo, por ejemplo, se viralizó en la red social Tik-Tok el video de un ciudadano cuya camioneta recibió un “cristalazo” y fue saqueada en el estacionamiento de la plaza Explanada Cholula, donde los guardias de seguridad ni siquiera detectaron a los delincuentes.

Incluso una tienda tan grande como la Mac Store del mismo centro comercial fue saqueada por cinco sujetos que, por la tarde del 21 de junio, amagaron a los empleados con armas de fuego y tomaron un jugoso botín de celulares y dispositivos de alta gama, el cual se llevaron con rápidamente en dos autos.

Si bien cada caso tiene sus particularidades, en todos ellos el común denominador es la falta de respuesta, si quiera mínima, por parte de los elementos de seguridad privada de los centros comerciales para auxiliar a las víctimas, sean clientes o locatarios.

Aunque la Asociación de Centros Comerciales de Puebla (Acecop), comentó a Ángulo 7 que los guardias están obligados a auxiliar a las personas que les reporten un ilícito, independiente si fue dentro o fuera de la plaza, reconoció que aún falta concretar la capacitación de este personal y la unificación de protocolos.

Para los ciudadanos, sin embargo, se ha hecho patente que la “ayuda” sirve de poco si sólo consiste en llamar a la Policía Municipal, que suele llegar demasiado tarde al lugar de los hechos.

Crece sector y baja seguridad

Estas carencias de seguridad en las plazas comerciales contrastan con el crecimiento que, pese a la pandemia, ha tenido el sector durante los últimos tres años en Puebla y su zona metropolitana.

Para este 2023, se prevén inversiones por más de mil 800 millones de pesos en proyectos como la plaza Downtown Center en Sonata, que tendrá el Walmart más grande México, así como la construcción de Riona, frente a las torres JV, y una más en la zona del Club Hípico de Lomas de Angelópolis.

Así que, si el sector de las plazas está en crecimiento y recuperación, según reconocen los mismos dueños, ellos deberían acelerar el reforzamiento de los protocolos de seguridad. Por su parte, las Policías municipales deben implementar medidas de auxilio y vigilancia efectivas que eviten a los delincuentes entrar y salir con impunidad de esto centros comerciales.

LPR

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