La reforma electoral es una de las tres iniciativas constitucionales que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, buscará concretar y que propone cambios a las estructuras del INE y del Tepjf, pues los ha señalado de no actuar como “verdaderos jueces”.
El mandatario ha señalado que la propuesta tendrá como principal objetivo el “garantizar la democracia, con elecciones libres y limpias”, así como reducir los gastos excesivos al interior de los organismos y en la realización de comicios.
En distintas ocasiones, el INE y el Tepjf han tomado decisiones que el mandatario criticó, como el ser “parciales”, no aplicar medidas de austeridad, así como no difundir las consultas de juicio a expresidentes o de revocación de mandato; a continuación un recuento de las más destacadas.
El 25 de marzo del año pasado, en pleno proceso electoral para votar a diputados federales, el INE cambió los criterios de asignación de los plurinominales, lo cual fue señalado como una “estrategia” para restar curules al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Un día después, el Instituto Nacional Electoral (INE) determinó retirar las candidaturas de los morenistas Félix Salgado Macedonio, a la gubernatura de Guerrero, y de Raúl Morón Orozco, a la de Michoacán, por presuntamente no presentar su informe de gastos de precampaña.
Tepjf cambia de postura y retira de candidaturas de Morena
López Obrador indicó que dicha acción fue un “atentado contra la democracia”, debido a que a los aspirantes se les impuso la sanción máxima por una acción que no lo acreditaba, tratando de restar votos al partido guinda que era puntero en las encuestas para ambas elecciones.
Los aspirantes de la “cuarta transformación” impugnaron la decisión y aunque el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Tepjf) en un primer momento desechó retirar las postulaciones, luego refrendó la decisión del INE, lo que generó críticas al organismo al cambiar su postura.
Reforma administrativa es acotada a una electoral
En ese contexto, el 29 de abril de 2021, el presidente de México reiteró que presentaría una “reforma administrativa” para que organismos autónomos, como el INE, pasaran a formar parte de las secretarías de estado o existieran cambios de fondo en los mismos, al no funcionar correctamente y estar “al servicio de empresas”.
Sin embargo, dicha iniciativa fue acotada al ámbito del INE y Tepjf, por lo que el 15 de junio, luego del proceso electoral, López Obrador anunció las tres reformas constitucionales prioritarias para su administración: la eléctrica, la electoral y una para que la Guardia Nacional (GN) sea manejada por la Sedena.
INE fue omiso en difundir consulta de juicio a expresidentes
En junio y julio, en el contexto de la consulta popular de juicio a expresidentes, López Obrador criticó al INE al ser omiso en difundir el ejercicio, al cual destacó por representar un avance en “la democracia participativa”.
En sus conferencias de prensa, el mandatario apuntó que los consejeros del organismo electoral no estuvieron de acuerdo en realizar la consulta, oponiéndose a fortalecer la democracia en el país, acusando una presunta insuficiencia de recursos, lo que llevó a que sólo instalar un tercio de las casillas necesarias.
Gobierno propone plan de austeridad a INE y lo rechazan
Luego de que la Cámara de Diputados aprobó un recorte de 4 mil 913 millones de pesos a los recursos solicitados por el INE, este acordó, el 17 de diciembre de 2021, aplazar las actividades de la consulta popular de revocación de mandato debido a una supuesta “insuficiencia financiera”.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) desechó la determinación y ordenó retomar las actividades al organismo, el cual solicitó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) una ampliación presupuesta que no se concretó.
En ese contexto, López Obrador planteó al INE aplicar austeridad en sus gastos, muchos tachados de ser excesivos, como seguros de gastos médicos privados y altos salarios.
Con la propuesta del gobierno federal, el instituto electoral tendría 2 mil 972 millones de pesos libres para hacer la revocación de mandato, disminuyendo gastos operativos como reducciones en conceptos como telefonía celular, combustibles, arrendamientos, viáticos y pasajes, alimentación, equipo, bienes informáticos, papelería, congresos y convenciones.
Los consejeros del INE rechazaron bajarse los sueldos o renunciar a “privilegios”, lo que desató críticas y que el presidente de México reiterara la necesidad de una reforma electoral.
