El 2 de octubre de 2011 registramos como Asociación Civil al Movimiento de Regeneración Nacional, en un acto efectuado en el Auditorio Nacional, para impulsar el Nuevo Proyecto Alternativo de Nación y el cambio profundo y verdadero de la vida pública del país. Por esta razón, celebramos el 2 de octubre, el aniversario de Morena.

Pero Morena viene de más lejos. Morena es la expresión de un movimiento social construido desde abajo por Andrés Manuel López Obrador. Diría que el punto de inflexión se dio en el 2004, cuando millones de mexicanos salimos a las plazas públicas a protestar contra el desafuero de López Obrador y a exigirle al gobierno de Vicente Fox, se respetaran sus derechos políticos.

En esas movilizaciones, la mayoría del pueblo nos encontramos con un líder que nos representaba en nuestros anhelos de justicia y democracia. Es a partir de ese momento, que Andrés Manuel López Obrador es reconocido como el dirigente político y social más importante del siglo XXI mexicano, y con él, nació una corriente política de la izquierda llamada lopezobradorismo.

En el 2006, Andrés Manuel encabezó la coalición “Por el Bien de Todos” y ganamos la presidencia de la República. Desde el gobierno operaron el fraude para burlar la voluntad popular e impusieron al espurio Felipe Calderón. Frente a este robo, decidimos iniciar un movimiento de resistencia civil pacífica, y el 27 de agosto de 2006, convocamos a constituirnos en la Convención Nacional Democrática y ocupamos durante 90 días la Plaza de la Constitución, la calle de Madero, la Avenida Juárez y el Paseo de la Reforma hasta el Auditorio Nacional.

El acto más importante de la convención ocurrió el 20 de noviembre de ese año, cuando miles de mexicanos reunidos en el zócalo, decidimos desconocer al usurpador Felipe Calderón y nombrar a López Obrador, como el presidente legítimo de México. En este acto participó el trovador Silvio Rodríguez. La base de esta decisión la encontramos en el artículo 39 constitucional, que establece que el pueblo es libre y soberano y puede darse, en cualquier tiempo, la forma de gobierno que más le convenga.

El gobierno legítimo fue un recurso para mantener dentro de cauces pacíficos y legales el vasto descontento político, económico y social que existía en el país con motivo del fraude. A partir de ahí, quienes compartimos las razones de nuestro movimiento nos empezamos a nombrar Protagonistas del Cambio Verdadero, tal como ahora se nombran en el estatuto a los afiliados de Morena.

En 2008, el usurpador Felipe Calderón, envió al Senado una iniciativa de reforma que buscaba privatizar Pemex, ante esto, el presidente legítimo Andrés Manuel López Obrador, convocó al pueblo a defender el patrimonio nacional a través de el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo, la Soberanía y la Economía Popular. Formamos entonces los Comités de Adelitas y de Juanes en defensa del petróleo. Yo tuve el honor de encabezar el Comité Generalísimo Morelos. Nos movilizamos en las calles y los diputados tomaron la tribuna durante 15 días. Derrotamos a la reacción. Esta victoria, levantó el ánimo y la moral de nuestro movimiento y nos demostró que organizados podíamos lograr derrotar a la derecha en el siguiente proceso electoral.

2009 fue un año de organización abajo, con la gente. En el balance de los tres años del Gobierno Legítimo, Andrés Manuel informó que había realizado dos mil 456 asambleas informativas municipales y que se contaba con Comités en todas las regiones del país.

Fue el 10 de mayo de 2010, en Zócalo, luego de seis años de picar piedra literalmente, cuando nos declaramos listos para iniciar la siguiente etapa. López Obrador propuso dejar atrás la Convención Nacional Democrática y asumirnos a partir de ese momento, como el Movimiento de Regeneración Nacional. Hago un reconocimiento a la compañera Bertha Maldonado, “Chaneca”, autora de la imagen de Morena. Se actualizó el programa Nuevo Proyecto de Nación, como guía política e ideológica de nuestro movimiento y se estableció lo que íbamos a hacer cuando ganáramos la presidencia de la Republica.

Asociación civil, inicio de Morena

Al momento de su conformación como asociación civil, Morena contaba con dos mil 217 comités municipales y 37 mil 453 seccionales, y miles de Protagonistas del Cambio Verdadero. Una fuerza mayor, que la de los partidos políticos con los que fuimos juntos a la elección del 2012.

A pesar de contar con mejores condiciones, los poderes fácticos impusieron a Enrique Peña Nieto en la presidencia, a través de utilizar todos los recursos legales e ilegales a su alcance, como la compra de votos, autoridades electorales que actuaron parcialmente a favor del candidato del PRI, financiamiento ilegal como los millones de pesos que entregaron empresas como Odebrech, el mapachismo electoral y el cambio de actas donde la coalición del Movimiento Progresista no tuvo representantes. El Tribunal Electoral no le dio validez a las pruebas que presentó nuestra representación, que comprobaban el financiamiento encubierto, la distribución de tarjetas bancarias y monederos electrónicos para la compra y coacción del voto, así como los gastos excesivos y la intervención de gobiernos locales. Como se demostraría posteriormente. Y nuevamente se frustró la esperanza de un cambio verdadero en México.

En la primera asamblea informativa después del fallo del Tepjf, realizada el 9 de septiembre de 2012 en el Zócalo de la Ciudad de México, el compañero Andrés Manuel López Obrador, esbozó el nuevo rumbo de Morena: transitar de asociación civil a partido político.

Lo que vino después es algo que también merece ser contado. La historia de Morena que va del 2012 al 2018, es algo excepcional, es la voluntad de millones de mexicanos que jamás se rindieron, que jamás bajaron las banderas, por el contrario, es la convicción, el anhelo, el sueño de construir entre todos una nueva Patria, y que nunca más íbamos a permitir que se nos arrebatará la esperanza.

Nuestro “Asalto al cielo”, la histórica victoria del 2018, es el resultado de todos estos años de bregar y resistir, en condiciones muy adversas. Son las mujeres y los hombres libres que se atrevieron a soñar, son los trabajadores y los desposeídos de años y años de saqueo y explotación. Son los trabajadores del campo que vieron pasar frente a sus ojos, el despojo de sus tierras y sus productos. Son los jóvenes que crecieron sin apoyo y sin oportunidades, abandonados a su suerte. Son los pequeños y medianos empresarios excluidos del desarrollo. Es la gente, la cojonuda gente, cansada de tanta corrupción. De mirar como los gobernantes se dedicaron a robarse el presupuesto y darse vida de magnates y con ello, ofendiendo la dignidad de las personas. Y no entendieron que con la dignidad no se juega.

Morena es del pueblo. Morena es el pueblo organizado. Morena es el pueblo obradorista recuperando la patria y llevando adelante la Cuarta Transformación de la República.

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