La lumbre a los aparejos
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que el principal inquilino de Casa Aguayo ha comenzado a perder la paciencia con su alma gemela, el consejero jurídico Ricardo Velázquez Cruz y algunos subordinados de éste, por los amparos que promovieron algunos notarios beneficiarios del morenovallismo contra la decisión de revocarles sus patentes, y porque el tiempo avanza y no hay resultados ni detenidos de varias de las denuncias que él mismo ha realizado.
Hasta ahora todo ha quedado en ruido mediático, en escándalos de prensa que se mueren en una o dos semanas por la ausencia de materia prima, es decir de evidencias y detenidos que acrediten el otorgamiento ilegal y discrecional de notarías, la expedición de títulos profesionales a gente no estudió ni acreditó sus saberes a su paso por el Instituto de Educación Digital (antes Universidad del Desarrollo), la supuesta venta de menores en los procesos de adopción del Sistema Estatal DIF, la venta de predios e inmuebles patrimonio estatal a precios muy abajo del valor comercial, la contratación de zapatos y uniformes escolares de mala calidad y sobreprecio, y un largo etcétera, etcétera.
A casi 130 días del inicio de la gestión barbosista, todas las denuncias de corrupción, abusos y excesos cometidos por los cuatro gobernadores que lo antecedieron en el cargo —Rafael Moreno Valle, José Antonio Gali Fayad, Martha Erika Alonso Hidalgo y Guillermo Pacheco Pulido— sólo han quedado en bla, bla, bla.
Y eso ya tiene impaciente al principal inquilino de Casa Aguayo y muy presionado al consejero jurídico, Ricardo Velázquez, que comienza a recibir reproches similares a los que en su momento tuvo que soportar la primera secretaria de la Función Pública de la administración barbosista, Karen Berlanga Valdés.
***
La lista de notarios premiados por el gobernador Rafael Moreno Valle que decidieron ampararse contra la decisión del gobierno de Luis Miguel Barbosa de revocar sus patentes y retirarles los folios y sellos sigue incrementándose.
Aquí la columna completa
Golpe al partido morenovallista
Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, señala que ya no tardan en caerle al Pacto Social de Integración, cuya sede coincidentemente fue “víctima del robo” hace unas semanas en Puebla.
De acuerdo con fuentes de la Unidad de Inteligencia Financiera este partido aparece involucrado en el uso de “factureras fantasmas” para “lavar” prerrogativas.
El PSI fue creación marinista, pero acabó como instrumento de poder del morenovallismo para la formalización de alianzas electorales.
A la hija del dirigente hasta la hizo senadora: Nadia Navarro.
Ahora que la Unidad de Inteligencia Financiera y el Servicio de Administración Tributaria revelaron la existencia de más de 265 empresas ligadas a las factureras fakes, el nombre del PSI surgió en una revisión a sus prerrogativas que realizó el Instituto Nacional Electoral.
Aquí la columna completa
El imposible regreso del “gatillero”
Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que la nada creíble versión del probable regreso del ex procurador Víctor Carrancá al cargo no está basada en hechos reales, sino el enorme miedo que tienen algunos miembros de gobiernos anteriores, ante el inminente proceso de ajuste de cuentas con el pasado, prometido por la administración de Miguel Barbosa.
Qué más quisieran ellos.
En sus años como encargado de la procuración de justicia en Puebla, como un auténtico gatillero a sueldo, Carrancá utilizó la institución a su cargo para ajustar cuentas con quienes le estorbaban a Moreno Valle y sus aliados.
Una de sus tareas prioritarias era garantizarle impunidad absoluta y eterna a los amigos, socios y cómplices de ese tiempo.
Las modificaciones legales aprobadas por el legislativo local, que en su momento le garantizaron su permanencia transexenal, comprueba los enormes favores que prestó a sus jefes y amigos.
Aquí la columna completa
Amarga Navidad o fábula del secretario que no se quiere ir
Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada Diario Cambio, señala que el próximo 15 de diciembre, cuando Luis Miguel Barbosa rinda su primer informe de gobierno para cumplir el mandato legal pese a que para esa fecha sólo llevará cuatro meses y medio en el poder, se apuesta si estrenará traje, corbata o secretario de Gobernación.
La relación disfuncional que por semanas han mantenido el gobernador con Fernando Manzanilla Prieto ya tocó fondo, y si antes era especulación, ahora con seguridad se afirma que el secretario de Gobernación no va a cargar los peregrinos.
Esa disfuncionalidad en realidad tiene un único fondo: el gobernador no confía en el secretario de Gobernación, por lo que éste se ha convertido en un funcionario nini: ni acuerda ni ejecuta ni tiene responsabilidades en la operación política estatal.
Expresión de esa disfuncionalidad es que Manzanilla es un secretario con cargo, pero sin rol. Ni siquiera tiene subordinados, pues con la salida de José Luis Márquez se fue el último mohicano que le tomaba parecer para algo.
Ahora, Manzanilla no tiene subsecretarios, ni director de gobierno, ni coordinador de delegados, ni delegados. Si no fuera por su particular y por su jefe de prensa, estaría más solo que una higuera en un campo de golf.
Aquí la columna completa
Manual Para Apagar Infiernos (Los Linchamientos y él Pésimo Humor Social)
Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, indica que el mal humor social en el país lleva a la gente a cometer extravíos brutales.
Un caso:
El lunes 2 de diciembre, a eso de las 23 horas, varios vecinos de Santa María Tonanzintla, junta auxiliar de San Andrés Cholula, reportaron el robo de un vehículo y un allanamiento de morada.
Al reunirse la gente en torno de los presuntos responsables surgieron las malas, pésimas, ideas:
“¡Hay que quemarlos vivos!”, gritaron algunos.
Aquí la columna completa
