Efraín Núñez/E-consulta

La administración de Rafael Moreno Valle Rosas construyó este sexenio más 61 kilómetros de ciclovías, con una inversión superior a los 800 millones de pesos, algunas de las cuáles son las más caras por kilómetro del país, al alcanzar 18.7 millones de pesos en promedio.

Armando Pliego Ishikawa, uno de los activistas que criticó la construcción de la ciclovía del bulevar Hermanos Serdán, afirmó que con una inversión de esa magnitud se pudo instalar infraestructura apegada a los lineamientos de movilidad internacionales.

Alta inversión por kilómetro cuadrado

Al finalizar la actual administración se habrán invertido más de 807 millones de pesos en la construcción de 61.3 kilómetros de ciclovías, lo que implica que cada kilómetro costó en promedio 13.16 millones de pesos.

La ciclopista que se construyó sobre el bulevar Hermanos Serdán tiene una longitud de 14.5 kilómetros y es considerada una de las más cara del país, con un costo de 271.3 millones de pesos, es decir, 18.7 millones de pesos por kilómetro.

Cabe señalar que adicionalmente se construirá otra ciclovía que comunicará la antigua estación “La Unión” del tren turístico a Cholula con la construida en el bulevar Hermanos Serdán.

Los 14.5 kilómetros se cuentan tanto de ida como de vuelta, ya que el trayecto en línea recta del bulevar es más corto.

Por extensión la ciclovía más larga es la que recientemente se inauguró sobre el Periférico Ecológico, que conecta con Cholula, la cual mide 18.3 kilómetros y tuvo un costo de 259.1 millones de pesos, es decir, 14.1 millones de pesos por kilómetro.

La ciclovía de la autopista medirá 15 kilómetros

En cuanto esté terminada la ciclovía que se construye bajo el segundo piso de la autopista México-Puebla tendrá una extensión de 15 kilómetros, y tendrá un costo de 150 millones de pesos, es decir, cada kilómetro tendrá un costo de 10 millones de pesos, los cuales a decir del gobernador Rafael Moreno Valle serán invertidos por la empresa Pinfra, que se encargó del paso elevado.

Sigue la ciclovía del paseo del río Atoyac, la única construida a ras de piso, con una extensión de 5.2 kilómetros, misma que tuvo un costo de 19.9 millones de pesos, es decir, 3.8 millones de pesos por kilómetro.

En tanto, la ciclovía que va de Ciudad Universitaria al Centro Histórico mide 4.8 kilómetros y tuvo un costo de 45 millones de pesos, aportados tanto por la administración estatal como por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Esto implica que cada kilómetro costó 9.37 millones de pesos.

Por su parte, la ciclovía de Angelópolis tiene una extensión de 3.5 kilómetros y tuvo un costo de 62 millones de pesos, es decir, cada kilómetro costó 17.7 millones de pesos.

Con esa inversión se construirían más proyectos de movilidad

En entrevista vía telefónica, Armando Pliego, afirmó que los 800 millones de pesos invertidos en las ciclovías sirven para construir una mayor infraestructura de movilidad no motorizada que cumpla con las especificaciones internacionales.

Cuestionó que a pesar de que existan estas vías, no son utilizadas por los ciclistas debido a que incumplen con características como ser construidas a ras de piso y fuera de camellones.

“La mayoría no cumple con los criterios de accesibilidad. No obedecen a un proyecto a largo plazo. Se han hecho estos proyectos de ciclopistas elevadas, en camellón y obedecen más a fines recreativos que a uno de movilidad”.

Desde su perspectiva esta infraestructura no obedece a un proyecto de “movilidad integral”, ya que la mayoría de ellas solo conectan con otras obras construidas por la administración actual.

“Se pudo hacer más con ese dinero. Con menos inversión en la Ciudad de México hay más de 140 ciclopistas. No existen estas ciclovías sobre camellón”.

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