Los mexicanos opinan que el robo de combustible por parte de huachicoleros sucede principalmente en 12 estados; el 40.4 por ciento cree que Puebla ocupa el primer lugar y siete de cada 10 indican que los huachicoleros son apoyados por la población.
Así lo reveló este miércoles una encuesta del Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública —de la Cámara de Diputados—, donde datos de Pemex corroboran dicha percepción, pues en el primer trimestre de este año la entidad ocupó el segundo lugar en número de tomas clandestinas aseguradas, con 402 localizadas en el “Triángulo Rojo”, sólo por debajo de Guanajuato, con 459.
Dicha zona está conformada por los municipios de Acajete, Acatzingo, Quecholac, Tecamachalco, Palmar de Bravo y Tepeaca.
Los otros estados considerados como focos rojos del huachicol son Veracruz (24.6 por ciento), Estado de México (13.2 por ciento), Jalisco (8.7 por ciento), Hidalgo (7.9 por ciento), Tamaulipas (7.2 por ciento), Michoacán (7.1 por ciento), Guanajuato (6.9 por ciento), Tabasco (5.7 por ciento), Guerrero (4.0 por ciento), Ciudad de México (3.8 por ciento), Chiapas (3.7 por ciento), mientras que el resto obtuvo menos del 3 por ciento de las menciones.
Familias prefieren trabajar en huachicol
Respecto del impacto social del huachicol, el documento, basado en notas periodísticas, resalta la participación de mujeres en la venta de combustible ilegal y niños usados como “halcones”, así como el hecho de que familias enteras prefieren dedicarse a este ilícito para mejorar su situación económica.
En este sentido, explica que la falta de oportunidades y los bajos ingresos que adquieren en las labores del campo han impulsado a muchos campesinos a desempeñarse como huachicoleros, pues de ganar 120 pesos por jornada, obtienen de 500 a 800 pesos realizando labores ligadas al robo de combustible.
Por otra parte, el 87 por ciento de los encuestados afirma que la causa del incremento del huachicol se debe a la “incompetencia de las autoridades”; el 27.1 cree que al alza de precios en las gasolinas, el 16.2, a la corrupción y la colusión del policías con criminales, en tanto que el 10.2 por ciento lo adjudica a la falta de empleo.
Además, 6 de cada 10 creen que trabajadores y dirigentes de Pemex están implicados en el robo de hidrocarburos y 8 de cada 10 estarían dispuestos a comprar estos, puesto que sus precios son considerablemente más bajos que los que comercializa la paraestatal.
El estudio concluye que, si bien el fenómeno de la ordeña de los ductos de Pemex no se distribuye de manera uniforme en el país, existen regiones identificadas como focos rojos, donde se precisa implementar alta tecnología, así como una parte de la estadística espacial exploratoria y de comportamiento para complementar las acciones de los gobiernos federal y estatales en el combate contra las bandas de huachicoleros.
