Enojo. Frustración. Sorpresa. Tristeza. Sentimientos encontrados. No sé, te juro lector que no sé describir el sentimiento que me invade. Me he vuelto una observadora de los sucesos de mi entorno. Y hoy decidí escribir de ello.
Observo el auge que han tenido los periódicos digitales de unos cinco años a la fecha. Se han incrementado por la demanda misma en el mercado, las necesidades y la búsqueda de satisfactores de su público.
Ellos los determinan, los condicionan a estar a la vanguardia en torno a los temas comunicativos y en este ejercicio de potenciar el ejercicio mediático. Y digo potenciar, porque los medios se potencian, no se excluyen; cada uno de ellos con su lenguaje propio, codifica y decodifica según su entorno lingüístico.
Para 2013, 2015 y en el 2016, el uso de estos portales digitales en conjunto con las redes sociales (facebook y twitter), se convirtieron en las principales estrategias de masificación de la información y opinión en la web; muy en particular adquieren una fuerza inusual las redes sociales.
La característica, de esta sociedad politizada, homogénea y plural, ha permitido que los códigos comunicativos fluyan de una manera dinámica, precisa y exacta, sustentada en el tiempo real de los acontecimientos comunicativos y las necesidades del ciber receptor.
Ahora bien, todo esto, con el objetivo de entender el concepto de la importancia y proliferación de los portales y redes dedicados a cubrir la nota roja. La multiplicación de los portales poblanos en torno a esta temática es interesante.
Las notas con estos tintes se han multiplicado de manera exponencial. La necesidad de mantener informado a su público ha orillado a generar medios para su difusión, interacción y decodificación en temas de hipertextualidad, multimedialidad e interactividad.
Bajo este orden de ideas, en esta misma semana fueron generadas dos nuevos portales poblanos de nota roja: Página de Periódico Central y Puebla Roja de Contrastes de Puebla; cabe señalar que son la respuesta a la creciente demanda de información por parte de los ciber receptores que no encuentran cubiertas sus necesidades informativas, ni de interacción en otros medios tradicionales.
En realidad, me sorprende y me asusta la demanda ciudadana por conocer este tipo de notas casi en tiempo real. Su creación obedece a esta oferta y demanda aunado al estado cuasi “fallido” en temas de impartición de justicia en Puebla.
Los poblanos nos sentimos vulnerables, temerosos, estamos asustados por lo que acontece en nuestra sociedad. ¿Te das cuenta querido lector cómo esta proliferación de medios de nota roja, es directamente proporcional al estado en que vivimos?
Vamos en el feminicidio 58. No tenemos alerta de género. Los “encargados” del cuidado de los ciudadanos están coludidos con los delincuentes. Hay una crisis en el seno familiar donde cada día vemos a irresponsables que en alto grado etílico provocan accidentes automovilísticos y le arrebatan la vida a gente inocente. Vemos a #Lord’s y a #Lady’s que se vuelven los personajes “tipo” de la nota roja que se escribe día a día.
Este sábado 2 de septiembre, el caso en que una joven “N”, aborda un taxi en la madrugada el centro de la ciudad y es llevada hasta el lugar donde dos sujetos abordan la unidad y la encañonan, la golpean, le roban y, siempre la mantuvieron bajo el terror de saber si le quitarían la vida.
Pero no acabó ahí. Es por segunda vez violentada y arrastrada y casi atropellada por el taxista que aparentemente era cómplice de los otros dos. Y por tercera vez violentada por la policía municipal. Y ¿por qué? Porque la policía municipal ¡bien gracias! No hizo nada para defenderla, ni las marcas de violencia, ni el cuerpo golpeado y los pies sangrados lograron ablandar sus corazones…me quedé sin comentarios. Fría. Con un dejo de impotencia. Y tristeza hasta la resignación.
Yo no quiero esta Puebla Roja. Y ¿Tú?
Pero, no sólo en Puebla capital suceden estos hechos. Hay violencia de muchos tipos en todas las sociedades y en todo el estado. Te comentaré otro caso, igual de triste como el de la joven de la UPN.
En el vecino municipio de Texmelucan. En uno de los colegios más prestigiados, la Upaep, tienen por maestra de inglés en cuarto grado a una “cavernícola”, que expresa sus frustraciones descargando golpes a los pequeños niños de la primaria. No sé qué tenga en la cabeza la supuesta maestra Silvia Pérez, pero ha provocado que todas las madres la denuncien ante la directora. Parece que la cesaron ya de sus labores con fecha del 2 de septiembre pasado, pero creo que por las forma de actuar para con los niños debiera ser sancionada directamente por la SEP. Quitarle la cédula profesional. Porque cuántos niños indefensos, podrán seguir siendo agredidos por ella sea en un colegio o en otro.
Estas son dos historias de nuestra Puebla. Son dos historias donde vemos víctimas y victimarias mujeres. Creo en las autoridades y en la adecuación, en temas de políticas públicas transversas. ¡Es necesario activar la alerta de género! Es necesario no volvernos nota roja.
Y si no…al tiempo.
@mayrusmayrus7
@Divandelamujer
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