Fermín Alejandro García/Cuitlatlán/La Jornada de Oriente
Una muestra del surrealismo morenovallista es la siguiente: Carlos Martínez Amador salió este lunes supuestamente a defender el honor y la legalidad del PRD, al presentar una denuncia penal ante la Fiscalía General del Estado contra los perredistas que se opusieron a la alianza con el PAN, pero resulta que este personaje es el secretario general del instituto del sol azteca y nunca ha ejercido las funciones estatutarias que le corresponden.
Incluso Carlos Martínez Amador nunca ha ocupado la oficina que le toca en la sede estatal del PRD, porque simplemente no se involucra en los asuntos internos del partido, no conoce al grueso de los líderes que hay en esta fuerza política, nunca ha visitado un comité municipal perredista y mucho menos ha buscado que su opinión se llegue a escuchar en las reuniones del secretariado de dicha agrupación.
Se supone que como secretario general del PRD tiene como funciones básicas el exigir los planes de trabajo de cada secretario del partido, garantizar el funcionamiento de los comités municipales y lograr la operación interna del partido. A más de dos años de estar en el cargo partidista, resulta que este político originario de Huauchinango es la hora que no emprende ninguna de las tres tareas que le corresponden.
Es tal su desapego que en una reunión del Comité Ejecutivo Estatal una integrante de la dirigencia un día le espetó, frente a los demás integrantes del secretariado: “Tú no me mereces respeto alguno, el día que te pongas a trabajar, ese día te voy a respetar”.
Con esos antecedentes resulta absurdo que ahora este personaje se busque alzar como una autoridad moral dentro del PRD, al proclamar que no quiere más prácticas ilegales dentro del partido. Frente a ello surge una presunta básica: ¿Y él cuándo ha cumplido con las obligaciones legales que le tocan en el Partido de la Revolución Democrática? Tal parece que no siquiera conoce las labores que le tocan cubrir.
Carlos Martínez Amador, luego de haber sido un rabioso militante del PRI y tener una breve estadía en el PAN, entró a las filas del PRD por una orden directa del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, quien a su vez negoció con Jesús Ortega, el líder de la corriente Nueva Izquierda, que el político originario de Huauchinango fuera el segundo dirigente en importancia en el partido a nivel local.
Martínez Amador no ha aportado nada al PRD, pero si ha fungido como un agente desestabilizador, ya que es el encargado del morenovallismo de amedrentar a los perredistas que se han negado a volver a repetir una alianza electoral con el PAN.
En su papel de golpeador, Carlos Martínez Amador se ha dedicado a buscar la oportunidad de derrocar de la presidencia del PRD a Socorro Quezada Tiempo, ya que esta mujer en su papel de legisladora no se ha disciplinado a los mandatos autoritarios del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.
A principios de 2014, dos legisladores del PRD, Carlos Martínez Amador e Ignacio Mier Bañuelos, acudieron a instancias nacionales del partido a “acusar” a Socorro Quezada porque se negaba a aprobar la llamada Ley Bala, la legislación que permite a la Policía disparar con armas de fuego a manifestantes.
Los dos legisladores se quedaron estupefactos cuando frente al senador Luis Miguel Barbosa Huerta éste les dijo que Socorro Quezada tenía todo el derecho a diferenciar su voto en el Congreso local, que el partido del sol azteca no es como el PRI, en donde sus integrantes se tienen que disciplinar a los mandatos de los gobernantes.
Y es que en general Carlos Martínez Amador e Ignacio Mier son miembros del PRD, pero ignoran todo lo concerniente al partido, no saben que representa ser de izquierda y cuál es el ideario de dicha fuerza. Están ahí porque los mandó Moreno Valle, pero lo mismo podrían estar en cualquier otra fuerza política.
Caso extremo en el de Ignacio Mier Bañuelos, diputado del PRD y que nunca ha puesto un pie en la sede del partido.
Otros dos morenovallistas que militan en el sol azteca y nunca han ido a las oficinas centrales del partido o a un comité municipal, son los ex titulares de la Secretaría General de Gobierno: Jorge Benito Cruz Bermúdez y Luis Maldonado Venegas.
Son perredistas que actúan como troles, ya que solamente entraron a alborotar al PRD.
Para mayor información:http://www.lajornadadeoriente.com.mx/2016/02/09/perredistas-morenovallistas-nunca-han-pisado-la-sede-del-prd/
