En Puebla, hay jóvenes que cuentan con el talento creativo para generar proyectos cinematográficos, tanto corto como largometrajes, sin embargo, recalcó que hace falta que las autoridades apoyen a esta rama de la industria.
Así lo consideró Rafael Quiroz Corona, co-productor con Sandra Guevara del cortometraje “Elena y las sombras”, el cual participa en la 14 edición del Festival Internacional de Cine de Morelia y fue creado por el estudio Embryonic.
En entrevista para Ángulo 7, afirmó que en su productora han participado estudiantes que demuestran habilidades para el cine, por lo que se debe apostar por el talento creativo que tienen los jóvenes.
Agregó que para la realización de su cortometraje se tuvo que mantener la calidad del producto final, pero con un ajuste en el presupuesto económico, lo cual dijo “con poco se puede hacer mucho”.
Se reconoce a Verne
Asimismo, en el cortometraje mexicano “Elena y las sombras”, destacó, se hace un reconocimiento al escritor francés Julio Verne por medio del personaje de Félix, unos lentes y un ave mitad máquina, por haber sido un autor que se adelantó a su época por su creatividad e imaginación.
Explicó que para la elaboración del filme trabajaron cerca de 40 participantes en su estudio durante un año, elaborando hasta 14 segundos por día para obtener los 6 minutos de animación.
Detalló que la técnica de animación que se utilizó para “Elena y las sombras” fue la Stop Motion, la cual conforma los movimientos de los personajes –elaborados artesanalmente con altura de hasta 22 centímetros– por medio de fotografías.
Comentó que dicho filme se desarrolla en una vecindad mexicana, en donde la protagonista Elena tiene una actitud pesimista, además de apática con respecto al mundo ya que todo le parece monótono.
Posteriormente, se encuentra con Félix, su vecino ciego, el cual la induce a sentir las emociones que él, pese a su situación, logra disfrutar debido a que interpreta el mundo de forma distinta.
Además, mencionó que después aparece un dragón simbolizando la luz en la oscuridad, y a partir de ese instante la ropa de ambos personajes cambian de color por el viaje que inician a través de su creatividad e imaginación.
