El 31 de marzo se acerca, fecha en que iniciarán las campañas locales, siendo la gubernatura que más interesa. Pero antes, Alejandro Armenta y Eduardo Rivera, se guardarán en jueves y viernes de Semana Santa, no para orar sino para alistar estrategias.
Ambos candidatos de Morena y el PAN con sus respectivas coaliciones habrán de analizar los puntos débiles de cada uno, qué denunciar y qué decir uno a otro, más a través de los que son sus voceros.
¿La guerra sucia? Tanto Eduardo Rivera y Alejandro Armenta, se comprometieron a hacer campañas de propuestas, pero atentos a no pasar por alto los ataques.
¿Las denuncias listas? Morena ha presentado 20 denuncias ante las instancias electorales contra Eduardo Rivera y Mario Riestra; mientras que los panistas afirman que tienen 46 contra Armenta.
Las campañas están por comenzar, pero se han venido dando “golpes bajos” de un equipo a otro.
Primero, Morena logrando la desbandado de priistas de la bancada en el Congreso del estado de Puebla, así como propiciar que cuadros importantes de ese partido mediaticen sus renuncias a la militancia.
Segundo, Eduardo Rivera afirmó en comida con periodistas del martes pasado, que habrá morenistas que se sumen a su equipo tras inconformidad por la designación de candidatos a los distintos cargos de elección popular.
Semana Santa para afinar detalles
El jueves y viernes, incluso hasta en Sábado de Gloria, ambos contendientes a la gubernatura afinarán los últimos detalles a sus campañas.
Alejandro Armenta iniciará su campaña en Izúcar de Matamoros, acompañado de la candidata a la presidencia, Claudia Sheinbaum Pardo. Mientras que Eduardo Rivera arrancará en la capital poblana, específicamente en plaza La Victoria de la zona de los fuertes.
