Querétaro te espera con sitios históricos y tradiciones que son una mezcla de su pasado indígena y virreinal, y que son patrimonio de la humanidad, como las Misiones Franciscanas, el centro histórico de su capital y las costumbres otomí-chichimecas.
De acuerdo con la Unesco, la ciudad colonial de Querétaro ofrece la singularidad de haber conservado su núcleo indígena primigenio de calles serpenteantes, junto con los barrios trazados con arreglo a un plan geométrico por los conquistadores españoles, por ello en 1996 se le incorporó en el listado de bien cultural.
La Secretaría de Cultura señaló que en esta ciudad se ve todavía el poderío económico que se vivió durante los tiempos coloniales. Construida sobre asentamientos indígenas originales, Querétaro es un muestrario de la arquitectura que se desarrolló en México entre los siglos XVI y XIX.
Sierra Gorda y sus Misiones Franciscanas
Las misiones franciscanas de la Sierra Gorda de Querétaro comprenden cinco inmuebles que se construyeron en la región montañosa, durante la última fase de evangelización en el interior de México a mediados del siglo XVIII, mismas que en 2003 fueron agregadas a la lista de la Unesco.
De las cinco misiones, Santiago de Jalpan (construida en 1751-58) y Nuestra Señora de la Luz de Tancoyol se localizan en el municipio de Jalpan de Serra; Santa María del Agua de Landa y San Francisco del Valle de Tilaco están en el municipio de Landa de Matamoros; y la misión de San Miguel Concá está en el municipio de Arroyo Seco.
Asimismo, la Unesco en 2009 nombró como bien inmaterial de la humanidad a las tradiciones de los otomí-chichimecas, y que es una festividad comunitaria que integra una serie de celebraciones llevadas a cabo en el año por los pobladores del semidesierto de Querétaro.
Datos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) indican que la peregrinación en ascenso a la Peña de Bernal es el clímax de una fiesta indígena que inicia cuando los fieles bajan de la cima a la misma cruz de madera y la llevan al pueblo de Bernal, en el municipio de Ezequiel Montes, donde es adorada en la fiesta de la Santa Cruz por cientos de peregrinos procedentes de diversos municipios de Querétaro, principalmente del valle de Tolimán, que danzan, cantan, rezan y lanzan cohetes al cielo.
Por último, Querétaro tiene un patrimonio cultural que comparte con estados como Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo, Guanajuato, Jalisco, Aguascalientes, Zacatecas, San Luis Potosí, Durango y Chihuahua y que es conocido como el Camino Real de Tierra Adentro, el Camino de la Plata o el Camino de Santa Fe, que fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco en 2010. Era la ruta por la que transportaban todas las mercancías durante el virreinato, especialmente la plata. Este camino fue creando riqueza y desarrollo a su alrededor, hecho que puede percibirse al día de hoy en las opulentas haciendas de San Juan del Rio.