Incluso en confinamiento, la gastronomía mexicana juega un papel importante durante las fiestas patrias, pues los platillos permiten unir a las familias a la distancia y se refuerza la identidad nacional; en el caso de Puebla, los chiles en nogada son emblemáticos.
Así lo expresó Mónica Orduña Sosa, directora de la Facultad de Gastronomía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), durante rueda de prensa virtual, en la que agregó que la antojería mexicana eleva su consumo en este mes patrio.
Afirmó que el pozole y las tostadas son los platillos mexicanos que más se consume a nivel nacional, además que uno de los productos que más se venden a nivel mundial es el “guacamole” que se degusta en diferentes países del mundo.
Orduña Sosa compartió que la Escuela de Gastronomía de la Upaep ha trabajado de manera colaborativa con la Secretaría de Turismo municipal en diferentes proyectos, entre ellos, la elaboración de una galería virtual, en donde también se unieron diferentes instituciones.
En el caso de la Upaep, le tocó hablar de la antojería poblana, en la cual tuvieron que seleccionar sólo cinco platillos dentro de toda la riqueza culinaria que tiene el estado.
Por su parte, Paola Vera Báez, antropóloga culinaria de la Facultad de Gastronomía de la universidad jesuita, comentó que en el pueblo mexicano el binomio fiesta-comida se ha mantenido unido desde sus orígenes, y es importante tomar en cuenta que todos estos platillos tradicionales surgieron a partir del movimiento llamado “nacionalismo culinario”, que nace en el siglo XIX y cobra mayor fuerza a partir de la Posrevolución Mexicana.
Indicó que es importante cómo un platillo puede llegar a contener diferentes ingredientes provenientes de diferentes partes del mundo y uno solo refleja la riqueza cultural que ha recibido el pueblo y que los mexicanos también son el resultado de esa riqueza cultural.
Editado por: Emma Flores Flores
