La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha quedado a deber en su facultad como protectora de los derechos humanos, debido a que necesita fortalecer su operatividad interna, expresaron especialistas en la Ibero de Puebla.
Durante una charla llamada “Límites y posibilidades de los derechos humanos”, organizada por la Universidad Iberoamericana (Ibero) de Puebla, especialistas abordaron el papel que ha mostrado la comisión en diferentes casos y situaciones en el país.
En su participación, Santiago Aguirre Espinosa, director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Prodh), indicó que las recomendaciones, es decir, los instrumentos para la protección de las garantías individuales, emitidas por la CNDH en los últimos dos años y medio corresponden mayoritariamente a casos ocurridos en sexenios anteriores, además, agregó que ha guardado silencio ante temas de seguridad y política exterior.
Las recomendaciones no han tenido impactos significativos y no han dado atención a todas las quejas recibidas, por ejemplo, en 2018 sólo se emitieron 20 para dar atención a más de 9 mil quejas recibidas, indicó.
Por su parte, Cuauhtémoc Cruz Isidoro, colaborador del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ (Idhie) de la Ibero de Puebla, dijo que el seguimiento de los casos por parte de la comisión, no ha permitido comprender y solucionar las situaciones más complejas que aquejan al país, lo que ha provocado que exista “incertidumbre para saber cuándo se cuenta con una CNDH como aliada”.
Rosy Laura Castellanos Mariano, consejera consultiva de la CNDH, defendió la nobleza de la institución, al comentar que necesita una revitalización interna y externa para garantizar el cumplimiento de las recomendaciones, por lo que es importante que la sociedad valore y critique el órgano, sin importar la administración que esté.
Editado por Alexis Lira Reyes
