Ante las disminución de ingresos por la pandemia de Covid-19 en Puebla, Alicia Vital Juárez, locataria del mercado Hidalgo, aumentó los días de descanso a sus tres trabajadores, a fin de no tener que despedirlos, pues “ahorita es complicado encontrar algo”.
La comerciante relató que conforme avanzó la emergencia sanitaria fue disminuyendo las personas que acudían a comprar los productos que ella vende, como tomate, jitomate, cebollas, chiles verdes, papas, entre otras verduras, y por ende esto genera menos ingresos.
Sin embargo, consideró que prescindir de los servicios de las personas que le ayudan no era justo, pues hasta antes de la pandemia cuando “todo está bien” nunca faltaron a su trabajo, por lo que no podía dejarlos sin el ingreso que semana a semana reciben.
“Todo ya es diferente. Ahora la gente tiene miedo y ya no sale, sabemos que a muchos trabajadores los despidieron, pero nosotros no podemos hacerlo, porque cuando ha habido han estado con nosotros y somos un equipo, no les haríamos eso”, comentó.
Ante esta situación, si bien dijo que su horario cambió, ya que por el Covid-19 venden de 9 de la mañana a las 6 de la tarde, cuando antes era de 7 de la mañana a 8 de la noche, optó por descansar más tiempo a cada trabajador para conservarlos, aunque les pague menos.
De 6 mil a 3 mil pesos pasó la venta
Dijo que todos sus empleados tienen un día establecido en el que no trabajan a la semana, pero con la pandemia decidieron que sean dos, y aunque no precisó cuánto es lo que les da, hizo énfasis que ella necesita de sus ayudantes y viceversa.
La locataria comentó que las actividades en el mercado han disminuido, así como los ingresos, pues de juntar 6 mil pesos al día, pasó de 2 a 3 mil , es decir, una baja del 50 por ciento, lo que también genera que en su momento haya tenido que recurrir al “guardadito” que tenía.
Y es que, comentó, en los primeros meses de la pandemia (marzo-abril) la gente no creía en que existía, pues llegaban sin cubrebocas y sin guardar la sana distancia, pero ahora, principalmente de junio a la fecha, parece que los poblanos “tiene miedo de salir a las calles”.
Vital Juárez refirió que una muestra de ello es que antes las unidades de transporte público pasaban llenas por el bulevar Norte y la gente se bajaba a comprar, pero actualmente solo son entre uno y tres los pasajeros que viajaban y no todos se meten a dicho centro de abasto.
Antes íbamos a la central todos los días
“Antes íbamos a la central a comprar mercancía todos los días, llevábamos entre 8 y 10 mil pesos, pero ahora depende como se venda, a veces lo hacemos cada tercer día y si llevamos 5 mil pesos es mucho, a veces sólo vamos por una sola cosa, la cosa ya no es igual”, expresó.
De igual forma, manifestó que la rutina ha cambiado, pues antes ni por la mente les pasaba usar el cubrebocas y el gel antibacterial, mientras que ahora deben hacerlo todos los días como una regla del mercado, además de que cada semana lavan con agua, jabón y cloro.
Mencionó que, si bien ha tenido bajas en sus ventas, al ser productos de primera necesidad como son legumbres, está vendiendo, pero hay otros locatarios como los que venden ropa, zapatos y otras mercancías que “la están pasando peor”.
Refirió que, aunque el gobierno estatal anunció que a partir del viernes se dará una reapertura económica paulatina en todos los sectores, esto no significa que la gente se va a desbordar de la noche a la mañana para salir a comprar, sino que va a llevar su tiempo.
“Esto de qué servirá si la gente no tiene dinero, esto es como una cadena, si no tienen dinero no van a comprar. Se necesita que se reestablezca la economía para que haya más ventas, los que no trabajan o no encuentran trabajo, pues no van a tener dinero”, asentó.