En el Centro Histórico de Puebla, existen locales fijos y ambulantes que ofertan cubrebocas de distintos materiales que, no obstante, no garantizan una protección adecuada contra el Covid-19, pues algunos son de tela sencilla, algodón y foami.
En un recorrido realizado por Ángulo 7, se pudo comprobar a las 13:00 horas, que sobre el corredor 5 de Mayo, entre las calles 10 y la 16 Poniente, al menos seis establecimientos fijos y tres ambulantes vendían distintos tipos de cubrebocas, estampados o lisos, algunos alusivos a las fiestas patrias o figuras infantiles.
En los exhibidores, lucían materiales de tela, algodón y de foami a un costo de diez pesos por pieza, dentro de protectores de plástico, mientras que en cartulinas se ostentaba la venta de supuestos N95 de distintos colores, a 30 pesos cada uno.
Los que están estampados de figuras de superhéroes o caricaturas costaban entre nueve y 12 pesos, precio que mejoraba por mayoreo, ante los cuales, adultos con niños se detenían a preguntar.
Sin embargo, no todas las telas son adecuadas para reducir la filtración de partículas de Covid-19, pues de acuerdo con un estudio realizado por la empresa Smart Air –especializada en purificadores de aire-– en abril, los materiales que menos filtran las partículas son el algodón natural, el poliéster, el lino, las mascadas y el terciopelo.
El argumento de la falta de eficacia de estos materiales recae en que son fibras naturales –algunas de capa delgada–, que no filtran las partículas adecuadamente y facilitan la acumulación de bacterias, siendo que los materiales sintéticos son los de mayor eficacia.
¿Cuáles son los materiales más resistentes?
Tras experimentar con 30 componentes, la empresa llegó a la conclusión de que los mejores materiales para crear cubrebocas caseros son la mezclilla, lona, toallas de papel, así como las sábanas de camas, debido a la poca transpirabilidad que ofrecen.
Cabe resaltar que en el Centro Histórico de Puebla se ofertan cubrebocas de algodón y tela delgada sencillos, toda vez que lo recomendable para evitar la filtración de partículas es que éstos sean de tres capas, además de que ofrecen cubrebocas de foami –o goma Eva– cuya eficacia aún no ha sido comprobada.
Para saber qué materiales de tela brindan una mayor protección, el presidente del departamento de Anestesiología del centro médico Bautista Wake Forest –en Estados Unidos–, Scott Segal, recomendó alzar el cubrebocas hacia el sol y notar si la luz se filtra.
Aclaró que traspasar la luz significa que el cubrebocas significa que “no es una buena tela”, mientras que un tejido más grueso y que menos filtre disminuye la probabilidad de que las partículas de Covid-19 sean absorbidas.
Hasta el pasado 21 de agosto, Puebla registró 283 contagios nuevos de Covid-19, por lo que llegó se llegó a un total acumulado de 27 mil 423 casos, por lo que la entidad se mantiene en color naranja del semáforo epidemiológico.
