Después de 3 años, la CDH emitió tres recomendaciones a la Secretaría de Salud (SS) por negligencia médica, pues en 2017, tres mujeres embarazadas, dos en Cuetzalan y una en Tehuacán, perdieron a sus productos por no recibir la atención adecuada en hospitales de esos municipios.
Esto, de acuerdo con la página oficial de la Comisión de Derechos Humanos (CDH), a cargo de José Félix Cerezo Vélez, en donde se publicaron dichos documentos, mismos que ya tuvieron que haber sido notificados a la dependencia estatal.
El primero de los casos es el registrado como 7/2020, asentado con el expediente 6216/2017 y su acumulado 6246/2017 en el que detalló que en marzo de hace tres años una mujer acudió al Hospital General de Cuetzalan a atención médica con motivo de su embarazo de 39.5 semanas de gestación, donde tras revisarla le dijeron que regresara al día siguiente.
El 29 de dicho mes, tras acudir al nosocomio, fue revisada en ocho ocasiones e ingresada a la salda de expulsión a las 9:30 de la noche, donde estuvo por 2 horas y media, siendo hasta después de la media noche del 30 de marzo que solicitaron su traslado a Teziutlán, debido a que no contaban con equipo quirúrgico completo para su atención, en específico con ginecólogo y anestesiólogo.
A las 3 de la mañana, cuando llegó al hospital de este municipio ya no había actividad cardiaca fetal.
El otro caso suscitado en el mismo nosocomio está referido en la recomendación 9/2020, con expediente 5756/2017; una joven de Cuetzalan acudió al nosocomio, en febrero de 2017, porque contaba con 37.4 semanas de embarazo y, tras ser valorada, se detectó que presentaba trabajo de parto, con 3 centímetros de dilatación, 30 por ciento de borramiento, producto en presentación podálica, poco perceptible y de difícil ubicación.
Además, tenía probable desnutrición in útero, por lo que decidieron ingresarla al área de tococirugía para vigilancia, sin embargo, en ese momento el hospital no contaba con tococardiógrafo, tampoco tenían servicio de laboratorio, ni de ginecología.
Dos casos fueron en Cuetzalan y uno en Tehuacán
Tras esto, fue traslada al hospital de Teziutlán a las 5 de la mañana para llegar a las 7, donde ingresó al área de urgencias y después de ser valorada, detectaron que había ausencia de actividad cardiaca fetal, por lo que hubo muerte.
En tanto, la recomendación 8/2020 con expediente 2780/2017 señala que la paciente embarazada de 37 semanas acudió al área de urgencias del Hospital de la Mujer y Neonatología de Tehuacán, en abril de 2017, donde tras ser valorada le detectaron signos de alarma y dejaron su cita abierta a urgencias en caso de ser necesario.
El 11 de mayo, se presentó a valoración por presentar contracciones irregulares, por lo que le hicieron estudios de laboratorio y ultrasonido, dado que padecía obesidad y se consideraba un embarazo de alto riesgo; al día siguiente refirió no sentir movimientos fetales, por lo que fue revisada el personal, quien la dio de alta con la única indicación de que regresara en una semana.
Por ello, se presentó el 19 de mayo, cuando la revisaron y le dijeron que había signos de alarma, no obstante, fue hasta el 22 cuando le detectaron el descenso de la frecuencia fetal y deciden intervenirla quirúrgicamente vía cesárea.
La CDH acreditó que personal del hospital detectó que había placenta desprendida en su totalidad, cordón umbilical corto, por lo que omitieron realizar las acciones inmediatas urgentes desde que observaron el inicio de trabajo de parto de la paciente, lo que culminó con la muerte del producto.
Hubo violaciones al derecho a la salud
En los tres casos, la comisión sostuvo que hay elementos suficientes para acreditar la violación a los derechos humanos de seguridad jurídica e integridad personal y a la vida relacionados con el derecho a la protección de la salud.
Por ello, el organismo autónomo pidió a la SS, encabezada por José Antonio Martínez García, que se proporcione a las agraviadas atención médica y psicológica, para restablecer su integridad física y permita su rehabilitación.
En el caso del Hospital General de Cuetzalan, que se asigne un médico especializado en el área de gineco-obstétricia, que atiendan en la forma adecuada, principalmente en el área de urgencias, y deberá dotar de aparatos auxiliares y en general de insumos a dicha unidad.
Esa última recomendación también fue girada para que se aplique en el hospital de la Mujer y Neonatología de Tehuacán, así como se brinde a los médicos de ambos hospitales capacitación al respeto y protección de los derechos humanos; que personal sujete su actuar a lo establecido por el orden jurídico mexicano; así como se dé vista a la FGE para la integración de la denuncia y carpetas de investigación relativas a los hechos que pudieran ser constitutivos de delito.
La CDH igual solicitó el Órgano Interno de Control inicie el procedimiento de investigación de responsabilidad administrativa en contra de los servidores públicos adscritos e estos hospitales que intervinieron en la atención de las afectadas y se actué en consecuencia.
Es necesario mencionar que no es la primera vez que se da a conocer negligencia médica en hospitales de Puebla, pues han sido en al menos otros dos casos más que han sido acreditados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
