Desde 2019, el rector Alfonso Esparza Ortiz aplica en la BUAP una política de “austeridad”, que incluye despidos y suspensión de contrataciones, pero no reducir su salario ni los de otros altos burócratas, cuyo ingreso anual es de hasta 1.3 millones de pesos, es decir, 63 por ciento más que el un investigador nivel C.
Entre 2013 a 2016, durante la primera gestión de Esparza Ortiz al frente de la máxima casa de estudios poblana, al menos una decena de trabajadores recibió puestos en la Fundación BUAP y como “funcionario designado por el Honorable Consejo Universitario (HCU)”, con salarios notablemente superiores a los de otros administrativos y académicos.
Lo anterior, de acuerdo con el concentrado de activos de nómina de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) correspondiente a dicho periodo, al cual este medio tuvo acceso y donde destaca el hecho de que los cargos mencionados son limitados y quienes los ocupan están identificados como personas de confianza del rector.
De esta manera, el único puesto que aparece para la Fundación BUAP, por ejemplo, es el de director Ejecutivo, cuya titularidad está a cargo de Gonzalo Bojalil Leyva, a partir de febrero de 2014. Desde esa fecha y hasta mayo de 2016, este funcionario sumó ingresos por 2 millones 739 mil 479.16, con percepciones mensuales que oscilaron entre 90 mil y 120 mil pesos.
Al respecto, vale resaltar que el salario de Bojalil Leyva sale de la nómina universitaria pese a que la fundación está registrada como asociación civil y donataria ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), además de que su consejo directivo lo integran empresarios.
En tanto, el puesto de este funcionario se inscribe en el grupo de personal directivo y su estado contractual es “determinado”.
En su página de internet, se afirma que está dedicada a desarrollar “proyectos e iniciativas dentro y fuera de la Universidad, para crear condiciones de igualdad y acceso a oportunidades”, pero la información sobre estos es mínima y no hay una página dedicada a la transparencia.
Designados por el H.C.U, los de más altos ingresos
Entre los burócratas de la BUAP, destaca el caso de los designados por el Honorable Consejo Universitario para diversos puestos del grupo de “personal directivo”, cuyos contratos son por tiempo determinado, pero sus ingresos mensuales oscilan entre los 90 mil y los 111 mil pesos por mes.
De ellos, Óscar Ignacio Gilbón Rosete, quien es titular de la Tesorería General de la BUAP desde 2013, tuvo ingresos por 5 millones 99 mil 721.81 pesos entre este año y el 2016, con los montos mensuales que se indican a continuación.
Por otra parte, está el caso de Eusebio Arnulfo Méndez Cordero, quien fue designado titular de la Defensoría de los Derechos Universitarios a partir de mayo de 2013, cargo que ocupó hasta finalizar 2014 y donde percibió 2 millones 87 mil 111 pesos.
Como muestra del contraste entre los ingresos de un alto burócrata y los de un investigador, basta contrastar lo que percibía Méndez Cordero en los meses previos asumir dicho cargo, como Profesor Investigador Titular A de Tiempo Completo de la Facultad de Contaduría, donde sus salario mensual oscilaba entre 26 mil y 30 mil pesos.
En 2015, fue nombrado secretario administrativo de la Facultad de Derecho, puesto en el que su ingreso anual disminuyó a 707 mil 881.59 pesos. Y un año después, volvió a dar clases como profesor de tiempo completo, con un ingreso de 470 mil 839.93 pesos al año.
Respecto a Méndez Castro, hay que recordar que fue el candidato de la gestión esparcista a ocupar la titularidad de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de Puebla.
En 4 años, ingresos de Esparza sumaron 5.7 mdp
Diferente es el estatus del rector de la universidad, quien no está clasificado como personal designado por el H.C.U, pese a que este lo nombra, y cuyo contrato es indeterminado.
En el caso de Alfonso Esparza Ortiz, quien ocupa dicho cargo desde abril de 2013, sus ingresos sumaron 5 millones 709 mil 460.74 millones de pesos entre esta fecha y diciembre de 2016, es decir, que su percepción mensual entre 113 mil y 148 mil pesos.
Estas percepciones distan mucho de las que la BUAP comparte en su sitio de transparencia donde sólo se provee un tabulador desactualizado que indica una percepción mensual de 87 mil 407.13 para el rector de la universidad.
En cambio, el documento que citamos muestra que un Profesor Investigador Titular C de Tiempo Completa tiene ingresos anuales de alrededor de 800 mil pesos mensuales.
La omisión de Esparza acerca de reducir los ingreso de la alta burocracia de la BUAP contrata con la otros rectores de las instituciones más importantes del país, como Enrique Graue Wiechers, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien desde 2019 se comprometió a devolver a esta casa de estudios el 12 por ciento de su sueldo mensual (177 mil 868 pesos).
En tanto, Mario Rodríguez Casas, director del Instituto Politécnico Nacional (IPN), quien también aseguró que iba a regresar de su salario (127 mil 740 pesos al mes) el 37.18 por ciento.
