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Gobernador, no deje que lo engañen

Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que no quisiera contradecir al gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, pero mucho me temo que alguien lo está engañando diciéndole que en la Cuarta Transformación poblana la corrupción ya casi se eliminó y los pocos casos que se han registrado corresponden a funcionarios de tercero o cuarto nivel.

La verdad es que no, que en su administración hay funcionarios que le mienten, que se coluden en las licitaciones y hasta manipulan los fallos ya publicados en Compranet con tal de salvar el pellejo y responsabilizar a otros de sus yerros y transas.

Un claro ejemplo es la licitación pública nacional GESALF-007-630/2019 que aquí le he comentado para la compra de instrumental y equipo hospitalario, cuyo fallo se adjudicó el viernes 29 de noviembre a dos empresas, una de las cuales obtuvo un contrato de casi 11 millones de pesos, no obstante ofertar bienes de origen chino y paquistaní, lo que expresamente estaba prohibido en la convocatoria y que claramente se reiteró en la junta de aclaraciones del 13 de noviembre.

Tras lo publicado aquí, el gobernador Miguel Barbosa y las secretarias de Administración, Rosa de la Paz Urtuzuástegui Carrillo, y de la Función Pública, Laura Olivia Villaseñor Rosales, exigieron una explicación a los funcionarios involucrados en este concurso, y el subsecretario de Administración, Juan Pablo Cortés Córdova, optó por deslindarse de las fallas y de responsabilizar a quien esto escribe, mediante una carta aclaratoria, de proporcionar datos falsos y tendenciosos para dañar su imagen.

Nada más alejado de la realidad.

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¿Navidad, tranquila para el rector Esparza?

La columna De boca e boca, publicada en Ángulo 7, señala que el rector de la BUAP, Alfonso Esparza Ortiz, podrá pasar una Navidad tranquila, es pregunta, ya que dos procesos de auditorias, una a lo que va de su ejercicio 2019, de enero a noviembre, por parte de la Auditoria Superior del Estado, pueden ponerlo nervioso y no dejarlo disfrutar su cena de noche buena.

Y es que el administrador de la máxima casa de estudios poblana insiste en querer escudarse en la autonomía para querer minimizar la revisión de sus cuentas y de paso victimizarse, cuando es una facultad de la ASE cerciorarse sobre el manejo de recursos estatales.

Así lo declaró un día después de recibir las notificaciones de las auditorías: que está todo en orden según lo comprobado por auditores internacionales, entonces no debería estar intranquilo que el auditor Francisco Romero Serrano, quiera abrir su libros blancos.

Ya lo dijo el refrán «El que nada debe, nada teme» o «El miedo no anda en burro».

Esposa de AMLO

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Auditan también a Claudia Rivera

Jorge Rodríguez en su columna A Puerta Cerrada, publicada en El Sol de Puebla, indica que el nuevo titular de la Auditoría Superior del Estado no se anda por las ramas.

El mismo día que Francisco José Romero Serrano dio inicio a un par de procesos de fiscalización en la BUAP, el miércoles 4 de diciembre, envió también una auditoría al ayuntamiento de Puebla para revisar el manejo de los recursos públicos en el primer año de gobierno de la gestión municipal.

Claudia Rivera Vivanco integra ahora, junto con el rector Alfonso Esparza Ortiz, esa selecta lista de servidores públicos que comenzaron a ser investigados casi al mismo tiempo que el nuevo auditor recorría el edificio de la 5 sur para conocer las instalaciones y presentarse con los miembros del personal que quedó bajo su mando.

La prisa aplicada en el caso muestra que hay mucho interés en indagar las cuentas del ayuntamiento de la capital del estado.

Si bien Rivera no ha querido hacer público el hecho, lo que puede explicarse como un intento por evitar la confrontación directa con el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, el episodio ha generado algunas suspicacias entre los integrantes de su administración, quienes se cuestionan las verdaderas motivaciones del auditor para ponerlos en la mira tan pronto.

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El discípulo de García Luna

Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, señala que con la detención de Genaro García Luna en Estados Unidos reviven los años que tuvo que padecer Puebla cuando su discípulo, aquel que mientras estuvo al frente de la Seguridad Pública en el estado permitió que se disparara el robo de hidrocarburos, los secuestros y sobre todo se convirtió en el brazo represor del morenovallismo. Acertó, estamos hablando del alumno Facundo Rosas.

Por cierto resulta interesante que los panistas estén guardando silencio sobre García Luna, que trabajó con Vicente Fox, y por supuesto fue la mano derecha de Felipe Calderón, pero no solo eso, extendió sus tentáculos a través de sus colaboradores. Por si ya lo olvidaron, les recordamos que fue Facundo Rosas, el oscuro personaje que organizó la represión en Chalchihuapan, así como otros operativos para reprimir a la oposición.

El 2 de abril de 2013 publiqué en esta misma columna una cita que repetí 28 meses después:

“Su pasado lo condena

Ayer Rafael Moreno Valle presentó a Facundo Rosas como nuevo secretario de Seguridad Pública. Sin embargo, su negro historial marca su carrera.

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Caída de Genaro García Luna pone nerviosos a importantes morenovallistas

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que aunque aparentemente no hay una conexión, la caída del policía estrella de los gobiernos del PAN, Genaro García Luna, seguramente ha puesto a temblar a importantes miembros de la ya disgregada facción morenovallista. Ya que, si se amplía en México la investigación de la protección oficial que se brindaba al Cártel de Sinaloa, podría alcanzar a un figura central del grupo político del exgobernador Rafael Moreno Valle Rosas: a Facundo Rosas Rosas, quien fue el titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Puebla y controló por varios años los cuerpos policiacos de por lo menos 82 municipios de la entidad.

Anabel Hernández es la periodista que más ha documentado la presunta relación entre Genero García Luna y el Cártel de Sinaloa. Sus investigaciones cobran notoriedad porque parecen ser parte del guión de la acusación a la que se busca vincular a dicho jefe policiaco, quien desde el lunes se encuentra detenido en Estados Unidos y al mismo tiempo, hay una petición de extradición del gobierno mexicano.

En el último libro de Anabel Anabel Hernández , titulado El Traidor, que es una relatoría de los testimonios de Vicente Zambada Niebla el Vicentillo, quien es hijo de Ismael el Mayo Zambada, líder del Cártel de Sinaloa, del supuesto contubernio que había entre esta organización y Genaro García Luna, se dice que los sobornos que se pagaban al exsecretario de Seguridad Pública también llegaban a otros jefes policiacos como eran Luis Cárdenas Palomino, Armando Espinoza y Facundo Rosas Rosas.

No es la primera vez que se menciona a Genaro García Luna y Facundo Rosas por parte de un capo del narcotráfico.

En alguna ocasión, Edgar Valdés Villarreal, quien fue el jefe de sicarios del Cártel de los Hermanos Beltrán Leyva, acusó que se pagaban sobornos a Genaro García Luna, para recibir protección. Y que, a partir de ellos, pasaba lo siguiente:

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García Luna, estratega azul

Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, señala que la detención en Estados Unidos del ex poderoso secretario de Seguridad Pública del panismo, Genaro García Luna, seguramente traerá fuertes implicaciones en Puebla.

La razón es simple: fue el principal asesor y operador del morenovallismo en la mentada guerra contra la delincuencia.

Por Genaro García Luna pasaron estrategias, tácticas y recomendaciones. La más evidente fue la de su principal operador, Facundo Rosas, cuyos jefes policiacos fueron detenidos en la cúspide del poder panista por estar implicados en la protección del huachicol.

García Luna mantuvo una relación muy estrecha con el ex gobernador Rafael Moreno Valle, al grado que durante el peñismo incorporó a otro personaje:

“Hemos contratado como asesor al exsecretario de Colombia, a Óscar Naranjo, él nos ha estado apoyando con algunos de los criterios técnicos”, reconoció el mandatario al ser entrevistado tras la inauguración de la rehabilitación del Hospital de San Martín Texmelucan, en el año 2013.

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Ya cayó García Luna y ¿para cuándo Facundo?

Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que fue detenido por fin, Genaro García Luna.

Se trata de uno de los personajes más oscuros en la vida pública nacional.

Las declaraciones de “El Chapo” en su juicio en los Estados Unidos, en donde aseguraba haber pagado millonarios sobornos a autoridades mexicanas del más alto nivel, a cambio de gozar de absoluta impunidad fueron determinantes para su captura.

García Luna ha sido señalado en repetidas ocasiones, por periodistas mexicanos que han investigado las relaciones inconfesables entre criminales y servidores públicos.

En su lista de incondicionales, de personajes cercanísimos con los que operó la fallida, pero para él muy rentable estrategia de combate a la delincuencia, ensayada en el sexenio de Felipe Calderón, se encuentra Facundo Rosas Rosas, el Terminator como lo nombra Anabel Hernández en su libro “México en Llamas”.

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Los magistrados del TSJ que están en la mira del barbosismo

Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada Diario Cambio, señala que este mediodía, cuando el gobernador Barbosa acompañe al magistrado presidente Héctor Sánchez a su informe al frente del Tribunal Superior de Justicia, se resolverá una de las incógnitas respecto al trato que le dispensará a un grupo de magistrados identificados con el morenovallismo, quienes siguen en pleito y cargan el sello de un grupo político en la frente.

Tres magistrados son los que esencialmente tienen problemas: Israel Mancilla, Jorge Cruz Bermúdez e Ignacio Galván Zenteno, los tres identificados con el morenovallismo-galicismo más recalcitrante. ¿Con qué cara saludarán hoy al gobernador?

Mancilla es el protagonista del zafarrancho en el Hotel MM, a quien los morenistas descubrieron en la cocina mientras quemaba documentos. El magistrado adujo que tenía una licencia otorgada por el TSJ, y aunque el Congreso local promovió una controversia para obligar al tribunal a presentar los documentos que la avalaban, un fallo negativo de la SCJN dejó todo en la oscuridad.

De Jorge Cruz Bermúdez se sabe que como escudero de Luis Maldonado Venegas fue parte activa del complot en 2015 para quitarle a Barbosa el control del PRD en la fallida sesión de Consejo Estatal realizada en el hotel de la Ex Hacienda de Chiautla que terminó a golpes. Luego, ya en el sexenio de Gali, fue enviado al TSJ para protegerlo pese a que su total ausencia de experiencia en la función jurisdiccional.

Por último, Ignacio Galván Zenteno llegó al cargo de magistrado también en el periodo de Gali teniendo como mérito su vínculo matrimonial con Arely Sánchez, ex titular de Salud. Galván hizo carrera como funcionario del Poder Judicial Federal sin llegar más allá de secretario de juzgado, pues nunca sobrepasó ese nivel.

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