Los niños que se dedican a ser “halcones” en la zona del Triángulo Rojo no es porque ellos lo decidan, sino porque se ven influidos por quienes los rodean, entre ellos sus familias, por lo que se debe mostrar mayor atención en la educación de menores.
Así lo consideró, en entrevista tras inaugurar el “Cuarto Congreso Internacional 2017”, Isabel María Crowley, directora ejecutiva de Fundación Juconi, quien agregó que los menores no es que carezcan de una formación sana, sino porque han sido educados bajo dicho ambiente, por lo que ve como algo “normal” esa actividad que ejercen a muy temprana edad.
“Los niños están ahí no porque hayan querido, sino porque los propios adultos son los que los inciden a ello, muchas veces decimos que están mal educado, los niños absorben lo que está a su alrededor por eso tenemos que diseminar las buenas practicas”, pronunció.
Sin embargo, reconoció que su fundación a cargo no tiene presencia en los cinco municipios que integran el Triángulo Rojo, que son: Tepeaca, Tecamachalco, Palmar de Bravo, Acatzingo y Quecholac, por lo que exhortó a los padres de familia poner en consideración este problema.
Aseveró que se debe anteponer el interés superior del niño por arriba de todos los demás y las autoridades tienen todos los elementos para hacerlo, pero hace falta actuar, aunque también debe ser un trabajo en conjunto con los ciudadanos, pues “nosotros como sociedad tenemos que cambiar también”.
Condiciones de vida igual influyen
Y es que recordó, el problema de la violencia a los niños no se ha podido erradicar porque los propios ciudadanos “lo han normalizado”, ya que a nivel nacional, de acuerdo con el Inegi, 4 de cada 10 menores han dicho haber sufrido algún tipo de agresión.
Sostuvo que también este problema se da por las condiciones de vida en la que se encuentran, no solo los menores, sino las familias, aunque –dijo— la situación de pobreza no es exclusiva sólo de Puebla, sino es un tema a nivel nacional.
En ese tenor, María Crowley reiteró que la fundación Juconi mantiene centros de ayuda en 11 localidades de la Mixteca poblana, en los cuales se encargan de orientar a niños que padecen estrés desencadenado del sismo del 19 de septiembre.
En tanto al congreso, se desarrollará del 25 al 27 de octubre en el Centro de Convenciones William O. Jenkins, bajo el lema “Generando ámbitos seguros para una cultura de paz” y va dirigido a instituciones, programas y profesiones orientadas a atender niños, jóvenes y familias marginadas por la violencia.
Será un espacio en el que 450 expertos y profesionales de México, América Latina, Estados Unidos, Europa África compartirán e intercambiarán metodologías y prácticas exitosas, además de que se realizarán conferencias y más de 50 actividades.