Al menos 500 hectáreas en las faldas de La Malinche pertenecientes a Puebla y otras 200 ubicadas en las juntas auxiliares serían declaradas zonas agrícolas, a fin de que se prohíba su venta y se den incentivos a los propietarios para que las cultiven.
Así lo anunció la regidora de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Myriam Arabián Couttolenc, quien consideró como urgente una declaratoria para “blindar” esas zonas ya que con ello también se evitará que la ciudad siga creciendo a los lados.
Lo anterior porque señaló que en el caso de los predios que no tienen dueño son “tomados o invadidos” por organizaciones, como el Movimiento Antorchista, que luego exigen que les sean regularizaos cuando no pagaron licencias para construcción y mucho menos por la propiedad del terreno.
Por ello, adelantó que trabaja en un proyecto de ley para que se prohíba la venta y construcción en algunos lugares, ya que son las pocas zonas en la capital poblana que no están habitadas y –consideró- deben permanecer como áreas verdes o de cultivo.
Explicó que no se busca una declaratoria de zona protegida por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), sino que el Cabildo la determine como zona agrícola para que se sancione a quien las utilice con otros fines.
En el caso de los predios que tienen dueño, reconoció que no se puede obligarlos “así nada más” a que no los vendan, por lo que aseguró que se les otorgará incentivos para promover su uso agrícola.
Priorizarán cultivo de maíz
Por ahora –aseveró– no se establece la cantidad de los apoyos o si serán en especie, ya que el proyecto sigue en su etapa preliminar.
No obstante, reveló que en él quedará estipulado que se dará prioridad a la siembra de maíz, aunque también habrá cabida para otros granos, legumbre o incluso verduras.
Todo esto porque puntualizó que “es un peligro” que ningún municipio tenga lugares establecidos para cultivar maíz, ni siquiera para satisfacer la demanda local.
“Es alarmante que todos nuestros alimentos tenemos que comprarlos de otras partes porque no tenemos ni el lugar, ni la infraestructura ni el interés de producirlos aquí”, sentenció.
Aunque no dio un estimado de cuándo podría estar lista su iniciativa, sostuvo que la llevará al Cabildo antes de que concluya el primer semestre del año.
Habrá división de giros territoriales
Y es que agregó que la dirección de Desarrollo Rural de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad está realizando el estudio de cuántas hectáreas específicamente entrarán y en qué zonas se ubican.
De igual forma, argumentó que en los próximos dos meses se realizará una división de la Angelópolis en 10 zonas, entre industrial, habitacional, agrícola, comercial y popular, para que también se prohíba la construcción de obras que no correspondan a la zonas establecidas.
Es decir que en las industriales no se construyan casas, en las habitacionales, fábricas y nada cerca de los campos de cultivo.
Lo anterior con el objetivo de que la ciudad tenga un crecimiento más ordenado y cada zona tenga regulaciones específicas, como la altura de las construcciones, los límites de ruido, las áreas verdes por metro cuadrado, etcétera.
