Martín Hernández Alcántara/La Jornada de Oriente Hasta la novena década del siglo pasado esta parte del Centro Histórico de la Angelópolis fue un barrio de vecindades desmedradas, en las cuales sobrevivían familias hacinadas de artesanos, obreros no calificados, comerciantes ambulantes y sirvientes, es decir: los marginados y explotados de la ciudad.