Con apenas 16 años de edad, Alondra, estudiante de bachillerato de Chignahuapan murió atropellada por un trabajador del Instituto de Ciencias Administrativas, Turismo y Humanidades (Icath), por lo que sus familiares exigen justicia para que el caso no quede impune.
La tarde de este 14 de marzo se dio a conocer del accidente en el que la joven estudiante del CECyTE de Chignahuapan, perdió la vida tras ser impactada por un Jetta gris mientras limpiaba su carrito de crepas.
Ante los hechos, familiares de la víctima señalaron que ya fue puesto a disposición del ministerio público el conductor, identificado como trabajador del Instituto de Ciencias Administrativas, Turismo y Humanidades (Icath), ubicado en el municipio de Chignahuapan.
Mientras las autoridades llevan a cabo las diligencias correspondientes a fin de que se dé a conocer la situación legal del homicida, pues hasta el momento no hay comunicados oficiales al respecto.
De acuerdo con testimonios, señalaron que el accidente vial se pudo evitar, pues el conductor estaba en tratamiento médico para evitar las convulsiones, por lo que indican que pudo haber engañado a las autoridades para obtener una licencia o para poder conducir.
En este sentido, argumentan que merece una sanción ejemplar por dejar sin vida a la joven Alondra de 16 años de edad.
“A Alondra, siempre se le veía ayudando a su mamá en el trabajo de la preparación de sus crepas que ocupaban como apoyo para salir adelante, nos indicaron personas cercanas a los familiares y también personas que eran clientes de este puesto ambulante” concluyeron los testificantes.
