De acuerdo con el último informe del Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (Igavim), el robo de hidrocarburos en México tiene registrados, de enero a septiembre del presente año, ocho mil 965 tomas clandestinas.

En el mismo período, pero del año pasado, se encontraron ocho mil 115, lo que significa un aumento del 10.47 por ciento. Sin embargo, al momento de estudiarlo por entidades, vemos que los cambios se notan se manera significativa.

Por ejemplo, Puebla, pasó de 245 tomas para el mismo período de 2022 a 352 para el presente año, lo que significa un aumento del 47 por ciento en los casos; en suma, vemos que el incremento es acelerado en el último trimestre, pues para junio del 2023 se registraron 226 tomas clandestinas, lo que se traduce en un aumento del 55 por ciento en sólo 3 meses.

La federación, a través de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, tiene registrado un diminución en este fenómeno, pues con corte al 30 de septiembre tiene registrados un promedio de 4.7 miles de barriles diarios de combustible sustraídos de manera ilegal, lo que contrasta con los 56 mil barriles diarios que se extraían en 2018.

Aunado a ello, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha ahorrado 291 mil 761 millones 656 mil 548 pesos desde el inicio de su sexenio a septiembre de 2023 por el combate a este fenómeno.

Mensualmente tiene destinados más de dos mil elementos de las fuerzas armadas para realizar operación contra el combate de marcado ilícito de combustible.

Pese a lo anterior, resulta todavía un reto frenar a raja tabla esta práctica, lo cuál no significa imposibles, pues en lugares donde habido un fuerte despliegue de las fuerzas de seguridad se ha logrado disminuir la apertura de tomas y por tanto el robo de hidrocarburos.

El Igavim tiene registrado en Michoacán 20 casos en comparación de los 267 que tuvo en 2022; Hidalgo, quien encabeza la lista, paso de cuatro mil 37 casos en 2022 a dos 981; en Tabasco, sólo se han presentado dos casos en comparación a los 14 que hubo en 2022.

Sin duda se necesita reforzar los esfuerzos (valga la redundancia) que hasta ahora lleva la federación, que a pesar de ser fuertes, sigue siendo un reto. Asimismo, el ejecutivo estatal debería sumarse a esta lucha.

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