Esta columna tiene su origen el jueves 12 de octubre, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador, ante la excelente pregunta del reportero de Pie de Página, Arturo Contreras, sobre la Comisión de la Verdad, habló sobre la necesidad de fortalecer al Ejército mexicano y dijo:
“Los de la DEA quisieran tener un Ejército mexicano, Fuerzas Armadas de México, debilitadas, sentadas en el banquillo de los acusados, para que ellos puedan hacer y deshacer en México, como se los permitía (Felipe) Calderón”.
Posteriormente, ese mismo día, le tocó a Ángulo 7 preguntarle al presidente y fue sobre cómo iba la investigación de las avionetas que campesinos de la región de Tehuacán –acusan– inhiben la lluvia y que, había mencionado, se iba a hacer la primera vez que este medio tocó el tema, a lo que respondió de forma valiente que solicitará el informe a Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) federal.
Digo de forma valiente porque podía haberle dado la vuelta al tema, pero algo que tiene López Obrador es su compromiso social y ser sensible ante las preocupaciones de la gente, por lo que siempre empuja en ese sentido.
Ante la importancia del informe sobre las avionetas y la desaparición del activista Carlos Rodríguez Leal donde se requería una búsqueda rápida y certera, el mismo sábado por la noche concluí que el Ejército mexicano es una institución de vital importancia para a fortalecer el Estado mexicano.
¿Qué institución puede saber de ambas cosas: del espacio aéreo y de temas seguridad? La respuesta es el Ejército mexicano.
El fortalecimiento del Estado mexicano ya inició
La tarea de fortalecimiento del Estado mexicano ya inició con la limpia de las instituciones públicas y la participación del mismo Ejército en la “reconstrucción de México”, al dirigir las principales obras públicas de este sexenio.
Hay varias críticas sobre este tema, pero hay que recordar que el Ejército mexicano es muy leal al mando civil, por lo que su actuación depende del mismo y su educación está cifrada en obedecerlo.
¿Por qué se requiere su participación? Aquí enlistamos las razones:
1) El Ejército es la única institución del Estado mexicano que prepara a sus integrantes desde soldados hasta Generales con la mejor tecnología del país.
2) Su preparación en todas las materias es de primer orden y con este gobierno se han fortalecido los temas de derechos humanos, equidad de género y soberanía nacional.
3) Sus integrantes conocen los problemas que afectan la soberanía nacional, es más algunos han sufrido en carne propia los mismos, y, además, su perspectiva moderada ayudará a que sean estratégicos en su resolución.
Por los anteriores motivos, el presidente les tiene confianza y aunque en sus filas hay Generales “conservadores” que quieren regresar al antiguo estado de cosas, en estos momentos, la mayoría de sus integrantes, como dice él, es pueblo uniformado dispuesto a luchar y contribuir por un mejor país.
Aunque también ello dependerá del mando civil. Y lógicamente para el fortalecimiento del Estado mexicano deben participar el resto de sectores sociales, siendo los ámbitos académico, empresarial y social, estratégicos para ello, pero también la participación propositiva del Ejército mexicano.