Humberto Sotelo

 

Como es del conocimiento público, Henri Kissinger falleció el pasado 29 de noviembre, a la edad de 100 años. 

      Como se ha dicho hasta el cansancio, fue tal vez el diplomático más brillante y capaz del siglo pasado, llegándosele a comparar con Metternich,  el canciller austriaco que tuvo a su cargo la recomposición del equilibrio de poder político en Europa a raíz de la derrota de Napoleón.

     Kissinger, en su libro Un Mundo Restaurado  (editado por el Fondo de Cultura Econonómica), se da a la tarea de comentar el papel que desempeñaron él y el Presidente Nixon en la configuración del nuevo orden mundial surgido al calor de la Guerra Fría.

   Entre sus méritos destaca el impulsar las negociaciones para poner fin a la Guerra de Viet Nam, lo cual le ganó el Premio Nobel de la Paz, en 1973, de consuno con Le Duc Tho, el representante vietnamita, quien por cierto rechazó tal presea. Se trató de una de las iniciativas más controvertidas del Comité del Nobel, ya que este pasó por alto los feroces bombardeos a Camboya, Laos y Viet Nam del Norte, instigados por el entonces presidente Nixon y su canciller, Henri Kissinger.

      Kissinger también desempeñó un papel crucial en el desenlace de la guerra del Yom Kipur, y años después en las complejas negociaciones para el establecimiento de la paz entre Israel y los países árabes.  Asimismo, fue uno de los principales promotores del acercamiento de los Estados Unidos con China, a fines de los años setenta del siglo pasado, sin duda una de las maniobras diplomáticas más sobresalientes de nuestro tiempo.

EL lado oscuro de Kissinger: Su apoyo al golpe de estado contra el presidente Salvador Allende

Kissinger fue el cerebro que instigó la intervención de los Estados Unidos en el golpe de Estado contra la Unidad Popular, el 11 de septiembre de 1973.   Aunque esto fue un rumor a voces, no fue sino hasta tiempos recientes que tal hecho se puso en evidencia. 

     Cincuenta años después de la llegada de Salvador Allende al poder, el 3 de noviembre de 1970, se desclasificaron varios documentos del Archivo de Seguridad Nacional estadounidense en los que se proporciona un registro detallado de la intervención de los Estados Unidos contra el gobierno de Allende.

   

Los documentos registran que Kissinger fue la influencia predominante para un esfuerzo sostenido para desestabilizar y socavar a Salvador Allende. A medida que se hizo evidente que probablemente fracasarían los esfuerzos de la CIA para instigar un golpe de Estado antes de la inauguración del gobierno de Allende el 3 de noviembre, Kissinger presentó a Nixon sus primeros argumentos para un enfoque agresivo a largo plazo que sería enmascarado en su hostilidad (Vid. Peter Kornbluh, “Derribarlo”: el ataque a Chile ordenado por Nixon y Kissinger que muestran los registros de la Casa Blanca.

https://www.ciperchile.cl/2020/11/04/derribarlo-el-ataque-a-chile-ordenado-por-nixon-y-kissinger-que-muestran-los-registros-de-la-casa-blanca/).

  De acuerdo a los documentos mencionados, Kissinger planteó dos posibles enfoques para su estrategia hostil: “Una sería una política franca y abiertamente hostil, utilizando todas las presiones posibles y demostrando esa hostilidad abiertamente”; “La otra sería adoptar una postura públicamente ‘correcta’ pero fría, con presión y hostilidad suministrada detrás del escenario, y medidas hostiles demostradas públicamente solo en reacción a la provocación”.

    Kissinger agregó: «Ambos cursos utilizarían esencialmente las mismas medidas, por ejemplo, la actividad de la CIA, las presiones económicas y diplomáticas. La diferencia —y el tema— radica en la cuestión de cuán sincera debe ser nuestra hostilidad»  (Ibid).

 A estas alturas queda claro que Kissinger no titubeó en adoptar una actitud intervencionista descarada, tal como lo confirmó después el pleno respaldo de los Estados Unidos al dictador Augusto Pinochet.

 Ese capítulo quedará, sin duda, como una de las páginas más negras, no sólo de la carrera diplomática de Kissinger, sino también de la historia de los Estados Unidos. 

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