El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que el exmandatario de Perú, Pedro Castillo Terrones, le habló por teléfono para solicitarle asilo en la embajada de México en ese país, luego de ordenar la disolución del Congreso y previo a su destitución.
En su conferencia de prensa matutina, reveló que tras la llamada pidió al canciller Marcelo Ebrard Casaubón abrir las puertas de la embajada en Perú “en apego a nuestra tradición”, pero fue bloqueada por policías y ciudadanos.
Presidente @lopezobrador_: #México se apegará a lo que decida el pueblo de #Perú respecto a sus gobernantes; confirmó que suspendió su visita para entregar la presidencia de la Alianza del Pacífico: se tiene que hablar con el resto de naciones integrantes.https://t.co/sa3Ae2fz1o pic.twitter.com/MNFF20CrM8
— Ángulo7 Noticias (@angulosiete) December 8, 2022
Reiteró que la política exterior de México continuará bajo los preceptos de “la no intervención y la autodeterminación de los pueblos”, aunque lamentó lo ocurrido a Pedro Castillo, pues aseveró que “fue víctima de acoso, de confrontación. No aceptaron sus adversarios, sobre todo las élites económicas y políticas de ese país, el que él gobernara”.
Expresó que posiblemente al sentir que el Congreso iba a destituirlo, Pedro Castillo tomó la decisión de disolverlo, con lo que les “dio el argumento” para que lo quitaran como presidente, usando el precepto legal de “incapacidad moral”.
Cabe mencionar que el exmandatario peruano fue detenido y destituido el pasado miércoles, luego de anunciar un estado de excepción y la disolución del Congreso, así como llamar a nuevas elecciones.
#AMLO dice que a @PedroCastilloTe de #Perú lo fueron debilitando para destituirlo. Contó que había racismo contra él. "Hay que aprender la lección porque hay golpes blandos". La recomendación es "gobernar para el pueblo" y no confiar en la élite política
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Fue un golpe blando, señala
López Obrador comentó que “es importante recoger la lección”, ya que circunstancias similares a las de Perú se están aplicando en otras partes del mundo y son denominados “golpes blandos”.
“Ya no es la intervención militar ya es ir, con el control de los medios de información, socavando a autoridades legal y legítimamente constituidas, más si se trata de gente surgida del pueblo o que quiere hacer algo en beneficio del pueblo. Entonces van implementando campañas de desprestigio, magnificando errores que se cometen siguen siendo los medios instrumentos para manipular y justificar actos contrarios a la democracia”, apuntó.
