Aunque el nuevo sistema de justicia laboral inició en Puebla hace casi un año, los abogados deben capacitarse para contribuir a no retrasar los juicios más de seis meses; por otra parte, en universidades como la BUAP, los alumnos de Derecho ya aprenden las nuevas reglas.
En entrevista con Ángulo 7, Susana Hernández Saavedra, litigante especializada en derecho laboral, consideró que algunos de sus colegas no han revisado con precisión los nuevos requerimientos, que ponderan la oralidad, el acceso a la justicia expedita o inmediación, la continuidad, la concentración y la publicidad.
“Hay un poquito de retraso también por culpa de los litigantes que, vuelvo a insistir, no estamos leyendo y queremos que el tribunal nos haga ese trabajo que en su momento nos toca como litigantes”, declaró.
La abogada mencionó que ciertos litigantes están realizando sus juicios echando mano de elementos del anterior sistema de justicia laboral, por lo que pidió que se actualicen respecto a la nueva normativa o legislación.
Aunque admitió que, en ocasiones, hay retrasos en la ejecución de algunas notificaciones o emplazamientos, sostuvo que el nuevo sistema es una buena iniciativa de las autoridades para mejorar la resolución de problemas en materia laboral.
Acerca de las juntas de conciliación y arbitraje, estimó que pueden tardar muchos años, hasta una década, para desahogar todos los trámites y juicios que tienen pendientes.
Citas en Puebla capital dificultan proceso a foráneos
Por su parte, Ana Lilia Rendón, también asesora de trabajadores en materia de derecho laboral, mencionó que un obstáculo del nuevo sistema de justicia laboral es uno de los requerimientos para iniciar un procedimiento referente al trámite de un citatorio.
Explicó que se trata de un requisito obligatorio que es difícil de realizar para las personas que trabajan fuera de la ciudad de Puebla.
“Realmente resulta para ellos un desgaste, tanto físico como económico, sobre todo, para trasladarse a la ciudad de Puebla de comunidades donde no hay centros de conciliación; vemos que es un impedimento para ellos poder tener acceso a la justicia“, declaró.
La especialista reconoció que los asuntos desahogados en los nuevos centros de conciliación suelen ser más ágiles, porque actualmente no hay un exceso en la carga de trabajo de dichos espacios.
Aunque añadió que las sentencias se dictan con mayor celeridad, dijo que las empresas solo están proponiendo negociaciones al 50 por ciento tanto respecto a las indemnizaciones como a la antigüedad, lo que definió como algo violatorio de las garantías humanas, porque no se están cubriendo los mínimos que establece la ley.
Alumnos de BUAP aprenden nuevo sistema
En tanto, Carlos Báez Hernández, pasante y estudiante de séptimo semestre en la licenciatura de Derecho, que ha tenido que aprender los procedimientos de ambos sistemas de justicia laboral, expuso que básicamente se conservan los mismos términos, pero ahora se pone énfasis en los derechos humanos.
Añadió que en la BUAP sí se está enseñando el nuevo sistema de justicia laboral como parte de la formación de los alumnos y señaló que uno de los retos en la materia es la oportuna adaptación por parte de los litigantes.
LPR
