El enfrentamiento en el municipio de Jolalpan, que dejó seis muertos el miércoles, fue producto de una emboscada de un grupo criminal proveniente de Guerrero en contra de miembros de Fuerza Territorial Poblana, autodefensa comunitaria de la región.
Hasta este jueves, trascendió que la autodefensa acudió a la carretera Huachinantla-Teutla, a la altura del tramo conocido como el Ciruelo, en auxilio de una persona supuestamente secuestrada.
Algunos espacios informativos digitales afirman que entre las seis personas fallecidas se encuentra el líder de Fuerza Territorial Poblana, Eloy Merino Mendoza.
No obstante, autoridades oficiales no han dado mayores detalles sobre los decesos, haciendo énfasis en que no se permitirá la existencia de grupos armados que actúen como policías.
“Nos ponemos del lado de las y los poblanos, nunca de los grupos de delincuentes”, indicaron.
Sumado a lo anterior, el titular del ejecutivo estatal anunció una estrategia entre los tres órdenes de gobierno para evitar hechos como el del jueves.
“No se puede sustituir la vida institucional en materia de seguridad pública por ningún grupo ciudadano armado o no armado“, sostuvo.
Tierra de nadie
De manera extraoficial, diversos reportes señalan que el enfrentamiento en Jolalpan dejó un saldo de 16 personas heridas.
El municipio en cuestión ya estuvo en el plano mediático durante el primer trimestre del 2021, cuando policías estatales fueron emboscados por integrantes del crimen organizado.
En su momento, el entonces titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Raciel López Salazar, informó que los grupos delictivos que operaban en la zona y sus integrantes ya habían sido plenamente identificados.
Jolalpan se ubica en el suroeste del estado de Puebla y colinda con Morelos y Guerrero, entidades que históricamente han sido sede de cédulas criminales.
LPR
