En los municipios de San Felipe Teotlalcingo y Chiautzingo persiste el problema de la “tala ilegal”.
En nuestros tiempos en el debate público se habla de la delincuencia con relación a delitos como la extorsión o el homicidio, por sólo mencionar algunos de los muchos que se perpetran en el país; sin embargo, en materia de fuero federal poco se habla de la “tala clandestina”, veamos con más detalle el tema.
La Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada a la letra dice: “Artículo 2.- Cuando tres o más personas se organicen de hecho para realizar, en forma permanente o reiterada, conductas que por sí o unidas a otras, tienen como fin o resultado cometer alguno o algunos de los delitos siguientes, serán sancionadas por ese solo hecho, como miembros de la delincuencia organizada: … X. Contra el Ambiente previsto en la fracción IV del artículo 420 del Código Penal Federal”.
El Código Penal Federal dice: “Artículo 420.- Se impondrá pena de uno a nueve años de prisión y por el equivalente de trescientos a tres mil días multa, a quien ilícitamente: … IV. Realice cualquier actividad con fines de tráfico, o capture, posea, transporte, acopie, introduzca al país o extraiga del mismo, algún ejemplar, sus productos o subproductos y demás recursos genéticos, de una especie de flora o fauna silvestres, terrestres o acuáticas en veda, considerada endémica, amenazada, en peligro de extinción, sujeta a protección especial, o regulada por algún tratado internacional del que México sea parte,… V. Dañe algún ejemplar de las especies de flora o fauna silvestres, terrestres o acuáticas señaladas en la fracción anterior”.
Es necesario tener presente lo anterior porque en Puebla existe delincuencia organizada en delitos contra la salud y tráfico de hidrocarburos principalmente, a los que se suma, si ello se puede comprobar, la “tala clandestina” de árboles tanto en el municipio de San Felipe Teotlalcingo como en Chiautzingo.
Uno de los modus operandi de los taladores es el siguiente: escogen un árbol, lo queman y posteriormente ya cuando es un “árbol dañado”, supuestamente, pues entonces lo talan; los árboles derribados tienen muchos años lo que se aprecia por su grosor, ¿los taladores tienen el permiso debido para esta actividad?, o ¿se trata de una “tala clandestina”?
Diversas autoridades estatales acompañadas por personal del Ayuntamiento de Chiautzingo han recorrido, entre otros lugares, “El Cipresal” para constatar la situación.
Asimismo, el Diputado Roberto Solís del Distrito VIII de Puebla ha denunciado la problemática, pero no nada más él, desde el año pasado también se divulgaron noticias que dan a conocer el problema de la “tala clandestina”.
El canadiense Michael W. Fox expresó: “Un acto contra la naturaleza debería ser juzgado tan severamente como uno contra la sociedad u otra persona”.
7 de abril de 2022
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