La Biblioteca Palafoxiana de Puebla sufre abandono e irregularidades desde al menos 2011, cuando inició la gestión del panista Rafael Moreno Valle Rosas, por lo que su auditoría “debe ser profunda”, pues la Unesco podría quitarle el nombramiento de Memoria del Mundo.
Así lo señaló, en entrevista con este medio, Monserrat Gali Boadella, integrante del Consejo de la Biblioteca Palafoxiana, quien indicó que uno de los principales motivos por lo que se ha dado dicho problema es porque quienes han estado a cargo no son “expertos” en recintos históricos.
Dijo que no sólo se trata de estar al frente de la Secretaría de Cultura estatal, sino que realmente deben estar “empapados” del manejo de esta biblioteca, ya que ello igual ha generado que no se le destine el verdadero mantenimiento que un inmueble de esta categoría implica.
Refirió que las irregularidades que fueron señaladas en días pasados por el gobernador Miguel Barbosa Huerta y el titular de Cultura, Sergio Vergara Berdejo, se acrecentaron a partir de enero de 2017 cuando se creó el Organismo Público Descentralizado Museos Puebla, en la recta del final del sexenio de Moreno Valle y que puso en marcha su sucesor Antonio Gali Fayad.
Comentó que, a partir de ese entonces, la dependencia estatal ya no podía estar a cargo de la biblioteca, sino que quedó hecha a un lado por el OPD antes mencionado, lo cual limitó las acciones a hacer, esto a pesar de que el consejo es el que debe proponer a un director especializado en bibliotecas antiguas y acervos históricos.
Incluso, sostuvo que cuando fue designada como subsecretaria de Cultura, en febrero de 2019 en el interinato de Guillermo Pacheco Pulido, no tuvo autoridad sobre dicho recinto, por lo que no pudo hacer algún reclamo sobre la gestión del recinto: “lo dejaron planchado en 2017 cuando reformaron la ley y eso fue un error”.
“Nosotros sentimos que tenemos un compromiso con la biblioteca, somos académicos o especialistas”, sostuvo tras recordar que, por mandato de la Unesco, en 2005 fue conformado el Consejo de la Biblioteca Palafoxiana; “si bien no se reunía, ya que solo un integrante es de Puebla, sí nos preguntaban cosas”, pronunció.
Auditoría se llevaría al menos un año
Por ello, dijo que el Consejo está abiertos a ponerse a disposición de la presente administración para el asesoramiento sobre la conservación del acervo del inmueble, así como para llevar a cabo la auditoría que anunció el gobierno del estado, para la cual igual pueden proponer personas que se dedican a eso, ya que de no hacerlo así “a cada rato se tendrían problemas”.
Lo anterior, porque sostuvo que dicho ejercicio “bien hecho” por lo menos se llevaría un año, ya que no solo implica contar los libros, ver qué les falta o si cambiaron ejemplares, sino que igual consta en saber qué tiempo tienen las mutilaciones que les hicieron y el instrumento que usaron, lo cual tiene que hacer un especialista.
Gali Boadella manifestó que si bien no tiene cuál es el presupuesto que se requiere, ya que para ello se debe hacer el estudio correspondiente, agregó que una de las principales herramientas con las que debe contar es un acervo digital para que todos lo puedan consultar de manera gratuita, pues en el morenovallismo fue retirado porque dijeron que era muy caro lo que se pagaba por dicha plataforma.
Sostuvo que “con este escándalo” dado a conocer por las autoridades estatales, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) podría quitar el nombramiento de Memoria del Mundo por ser un tesoro universal, lo cual no se debe permitir y ante eso se debe garantizar su continuidad, al resaltar que no es un problema de partidos, sino de profesionalismo en el cuidado del patrimonio.
“En 10 años, cuántas tropelías se habrán hecho, ese es el problema, nosotros tenemos que ver hacia el futuro y queremos que la biblioteca tenga el presupuesto que necesita para cumplir son sus obligaciones y evitar que se den otra vez situaciones como los que dieron a conocer”, asentó.
Es necesario mencionar que los integrantes del consejo, además de Gali Boadella, están académicos e investigadores nacionales y extranjeros como los doctores en Historia español Ricardo Fernández Gracia; en Historia por la Universidad de Arizona, Michael M. Brescia; la bibliotecóloga por la UNAM, Rosa María Fernández Esquivel, y la doctora en Historia del Arte por la Universidad de Sevilla, Isabel Grañén Porrúa, entre otros.