Los morenovallistas están de regreso en el Congreso
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que con este encabezado no me refiero a Sergio Salomón Céspedes Peregrina y a otros diputados de la actual Legislatura local que estuvieron plenamente identificados con el extinto exgobernador Rafael Moreno Valle, sino a ciertos funcionarios del Poder Legislativo.
Entre ellos Édgar Sánchez Farfán, quien ya retornó al Congreso del estado como director general de Asuntos Jurídicos, de Estudios y de Proyectos Legislativos, el cargo que ya había tenido, y José Norberto Rodríguez Medina, quien este jueves regresará como secretario General del Poder Legislativo por la puerta grande.
Sánchez Farfán fue pieza clave en la LIX Legislatura, la segunda de Rafael Moreno Valle, la de 4 años y ocho meses, donde desempeñó en el puesto que hoy ostenta, y antes fue coordinador técnico jurídico de la Unidad de Enlace Legislativo de la Secretaría General de Gobierno del estado, y director general de Enlace Institucional con Dependencias y Entidades de la Consejería Jurídica del Ejecutivo estatal, ambas dependientes de Fernando Manzanilla Prieto.
Jorge Cruz Lepe, un “halcón” de la derecha que lleva 25 años hostigando a organizaciones populares
Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que la amenaza de encarcelar a los líderes de la 28 de Octubre que lanzó Jorge Arturo Cruz Lepe, el recién estrenado secretario de Gobernación del ayuntamiento de Puebla, no es un hecho aislado, pues este personaje cuenta con un largo historial de unos 26 años de tener una actitud beligerante y clasista en contra de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes (UPVA). Hace poco más de dos décadas provocó una de las peores agresiones sufridas por la UPVA, que dejó un saldo de sangre, dolor y destrucción.
Cruz Lepe es uno de esos “halcones” de la derecha poblana que creen que las organizaciones populares son un cáncer de la sociedad y que se deben de combatir, desaparecer, aniquilar. Eso ha demostrado a su paso en las tres ocasiones en que ha sido parte de los gobiernos panistas de la capital.
Es un personaje que está empezando a generar un fuerte contraste con el propio alcalde de la ciudad de Puebla, pues mientras el edil Eduardo Rivera Pérez ha mandado un mensaje de buscar diálogo y consensos para generar un reordenamiento del comercio del Centro Histórico de la capital, el secretario de Gobernación está utilizando la misma estrategia violenta que el morenovallismo empleo en contra de organizaciones populares, entre las que destacó la UPVA, a la que se le intentó exterminar.
El suicidio energético del PRI
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que aunque en estos momentos la atención en San Lázaro está centrada en el Presupuesto de la Federación para 2022 y las reformas que golpearán a la mayoría de los mexicanos, principalmente a los jóvenes; en paralelo se cocinan los votos priistas o las inasistencias que AMLO requiere para que su Reforma Energética sea avalada.
Hasta hoy, la postura del tricolor ha sido tibia y timorata, tanto, que parece que sólo está encareciendo sus canicas para finalmente doblar las manitas, lanzar por la borda la alianza con el PAN y el PRD, traicionando así a quienes confiaron en ellos y entregándose a la voluntad del tlatoani del Palacio.
Lo hemos dicho. La traición del PRI será el autogol de su descenso y la bala del suicidio, porque después de una acción como esa, su ya devaluada marca, terminará con menos valor que una moneda de 50 centavos.
