Uno de los retos más grandes que debe afrontar la BUAP, en sus preparatorias, es la condición laboral de los profesores, quienes tienen numerosos grupos, aunado que la pandemia aumentó su carga de trabajo, consideró la docente Aleida Pardo Martínez.
En entrevista para Ángulo 7, la educadora en la preparatoria Enrique Cabrera Barroso afirmó que, dependiendo de la unidad académica, el estudiantado llega a ser de 40 a 47 alumnos, mientras que en su caso hay siete grupos por cada uno de los tres años de bachiller, unos 21.
Además, agregó, durante la pandemia se incrementaron los grupos a los profesores, pues solo en su unidad académica fueron 10 más por el incremento de la matrícula de aspirantes de nivel medio superior, lo cual llevará a un sistema de clases mixto – a distancia y cursos fines de semana- en las instalaciones de los bachilleres.
“Imagínate que los docentes tiempos completos tenemos 10 o 12 grupos para impartir nuestra materia, ahí es cuando lo vemos complicado”, comentó Pardo Martínez.
Cabe resaltar que, de con acuerdo el Anuario Estadístico 2019-2020 de la BUAP, el 62 por ciento de los docentes en preparatorias son horas-clase, mientras que un 22.7 por ciento son de tiempo completo y el 15 por ciento restante, medio tiempo.
Son en total 26 unidades académicas que imparten el nivel medio superior en la universidad, las cuales dan clase a 22 mil 381 estudiantes, mientras que se estima que hay mil 104 docentes, distribuidos en 14 academias, es decir, un profesor por cada 20 alumnos.
Presiones para respaldar a directivos
La profesora del área de Informática, quien cumplirá 26 años de labor en la BUAP, sostuvo que se debe dar a los docentes “reconocimiento en sus labores”, pues afirmó que el nivel medio superior tiene la “obligación de dar calidad a los estudiantes”, quienes en su momento aspirarán a una licenciatura.
Pardo Martínez colaboró en el proyecto “Retos”, una iniciativa emanada del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (Icsyh) de la BUAP, donde se presentaron propuestas para la agenda universitaria, de cara a la renovación rectoral en octubre de 2021.
Prepas, más propensas a control político
En otro tema, la docente, señaló que los bachilleres de la universidad son más propensos al control político, por parte de directivos a profesores, así como a los alumnos de nuevo ingreso.
Pardo Martínez afirmó que, desde su experiencia, hay prácticas electorales en la universidad pues denunció que hay casos de profesores que son presionados para respaldar a los directores: “los tienen agarrados del cuello”.
Señaló que, tras incorporarse al proyecto “Retos”, fue descartada de tener un grupo tutorado, siendo que al ser profesora de tiempo completo era un perfil “idóneo”, en tanto que atribuyó este desaire a su integración al grupo de docentes, quienes en determinado momento planean impulsar un candidato a rector, en la próxima elección.
“Yo considero que es precisamente por la cuestión electoral, a partir de que yo estoy ya participando en los retos ya también nos van etiquetando y de esa forma nos van descartando”, concluyó.
