Odiosas comparaciones electorales de cara al 2024
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que a la luz de los resultados electorales de hace tres años, el saldo que dejan los comicios del pasado domingo 6 de junio es negativo para casi todos los partidos políticos. Los únicos que lograron elevar su votación, en el comparativo de elecciones de diputados de mayoría relativa de 2018 y 2021, fueron Movimiento Ciudadano (MC), el PT y el PSI.
Fue tal el crecimiento de MC, del 41.75% respecto de 2018, que prácticamente se convirtió en la cuarta fuerza política del estado, solo por debajo de Morena, el PAN y el PRI.
Morena fue el partido que registró la mayor merma, de acuerdo con los datos que arroja el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) de esta elección. En números redondos perdió 254 mil sufragios, o casi una cuarta parte de su votación de hace tres años.
Le siguen el PAN que perdió 196 mil sufragios, cifra que equivale al 30% de sus votos de 2018, y el PRI cuya votación cayó en 127 mil, es decir en casi un 26%.
¿Qué conclusiones podemos sacar de estas cifras?
Aplaudamos el voto diferenciado
Jorge Rodríguez en su columna A Puerta Cerrada, publicada en El Sol de Puebla, indica que Eduardo Rivera Pérez y los cinco partidos que lo postularon barrieron con Claudia Rivera Vivanco, Morena y PT en el municipio de Puebla, con una ventaja de 118 mil votos que significaron 21 puntos porcentuales de diferencia. Sin embargo, ese sufragio contundente en favor del panista no fue el mismo en la elección de diputados federales y locales, lo que permite ver que los electores emitieron un voto diferenciado y que Morena no ha sido extinguido en la capital.
Los resultados de la elección de presidente municipal muestran una abrumadora victoria de PAN, PRI, PRD, PSI y Compromiso por Puebla sobre los partidos del mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, en la que Rivera Pérez obtuvo 295 mil votos, contra 177 mil de Rivera Vivanco. La diferencia entre los dos candidatos es enorme y esboza un escenario sumamente optimista para el partido blanquiazul, líder de la alianza opositora, con una ruta en apariencia despejada para caminar sin contratiempos hacia la sucesión de gobernador del 2024.
Ayer mismo, entusiasmados por el triunfo en la capital y los municipios conurbados, los dirigentes estatales de los partidos PAN, PRI y PRD ofrecieron una conferencia de prensa para celebrar lo sucedido y advertir que, incluso a la distancia, ya planean replicar la alianza en los próximos comicios locales.
Antes de sumarse al jolgorio, empero, hay que revisar lo ocurrido en la contienda de diputados federales y locales en el mismo municipio de Puebla para observar que Morena no fue herido de muerte como se cree.
Morena, en su alianza con el PT y el Verde, ganó uno de cuatro distritos federales y cuatro de siete distritos locales existentes en la capital.
Pleito entre los primos Márquez desata conflicto electoral en Zacatlán
Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que con casi 96 por ciento de las actas escrutadas en Zacatlán, la diferencia entre el PRI y Morena en la lucha por la alcaldía es de apenas 328 sufragios, que es menos de 1 por ciento de la votación total. Sin embargo, la disputa por el ayuntamiento no es en estricto sentido una competencia entre partidos, sino entre dos primos – Luis Márquez Lecona y José Luis Márquez Martínez– y una trama de alianzas, traiciones y un encarnizado altercado por el poder.
Y aunque no lo parezca, es un pleito entre morenovallistas y de importantes fortunas que se construyeron al amparo del poder político.
Un pleito que el domingo estuvo a punto de provocar un baño de sangre por la aparición de grupos armados, que muchos aseguran que eran policías municipales vestidos de civiles, intentando frenar la operación electoral del PRI y hacer ganar a la mala al candidato de Morena.
Alianzas para hacer bulto
Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, indica que muy orondos estuvieron los dirigentes estatales del PAN, Genoveva Huerta; del PRI, Néstor Camarillo; y del PRD, Carlos Martínez, tras los resultados electorales que ya hasta propusieron mantener su alianza para el 2024.
¿En serio?
Este futurismo, reflejo vivo de la política aldeana, expone que no han leído bien el mensaje que dejaron los ciudadanos/as en las urnas.
En la zona metropolitana de Puebla, donde quizá puede decirse que la alianza arrojó sus mejores resultados, sería bueno detenerse en el análisis para que Genoveva Huerta sepa que el PAN no necesitó al PRI, PRD, PCP y PSI.
De acuerdo con el cómputo final del PREP en la capital del estado, Acción Nacional obtuvo 213 mil 400 votos contra los 177 mil 567 sufragios que recibió Claudia Rivera Vivanco su coalición Morena y PT.
Giorgana; de cómo ganar elecciones
Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que dentro de las responsabilidades que se repartieron en la alianza de partidos que compitió contra Morena en territorio poblano, a Víctor Manuel Giorgana le tocó operar el municipio de San Pedro Cholula.
Y contra todo pronóstico entregó buenos resultados.
La victoria de Paola Angón es clara, contundente, demoledora y al margen de cualquier duda.
Si bien es también multifactorial, en su búnker existió la capacidad y experiencia para poder maximizar aquellas circunstancias que podrían jugar a su favor en esta contienda.
Haber ganado por 14 puntos el municipio, no es cualquier cosa.
AMLO va por el PRI
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que después de que Morena sufrió un fuerte descalabro y no contará con la aplanadora que hoy tiene en San Lázaro, el tlatoani del Palacio Nacional ya encontró la manera de imponer su santísima voluntad.
Ayer, durante su mañanera, Andrés Manuel insinuó que podrían comprar a priistas para alcanzar la anhelada mayoría calificada, es decir a las dos terceras partes de los diputados, y con ello contar con la aprobación de cuantas reformas y locuras se le ocurran durante la segunda parte de su mandato.
Además de estar confesando una de las maneras más viles de operar en la política, el presidente demostró que para él la democracia o las voluntades se compran, así sin más, como si los diputados que llegan a San Lázaro no tuvieran decoro ni dignidad.
