La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) investiga el caso del presunto asesinato de un joven migrante guatemalteco en Mazapa de Madero, Chiapas, donde militares lo ultimaron a balazos al intentar cruzar la frontera en una camioneta.
De acuerdo con el organismo, se tiene conocimiento de que la camioneta en la que viajaba como copiloto el joven trató de evadir un retén que el Ejército mexicano había establecido a pocos metros de la línea divisoria entre México y Guatemala, en el municipio.
Ante los presuntos hechos violatorios de derechos humanos, difundidos en diversos medios de comunicación, la CNDH inició la investigación de oficio con la finalidad de indagar posibles actos u omisiones cometidos por parte de servidores públicos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Esta Comisión Nacional integrará el expediente de queja respectivo y solicitará información a la autoridad involucrada en los hechos para que, en su momento, emita el pronunciamiento que conforme a derecho corresponda.
Ante lo ocurrido, la Fiscalía General del Estado de Chiapas (FGECH) inició la carpeta de investigación respectiva. Asimismo, se indicó que los lugareños detuvieron a los soldados que mantenían el retén y más tarde se sumaron personas de nacionalidad guatemalteca de diversas comunidades cercanas.
Al sitio, llegaron peritos y agentes ministeriales para realizar las diligencias ministeriales correspondientes, así como servidores públicos de la Secretaría de Gobierno de esa entidad federativa, para averiguar el paradero de los soldados involucrados en la referida agresión.
Este nuevo caso de violaciones graves a derechos humanos se suma al de Victoria Salazar, quien fue asesinada por policías que la detuvieron el sábado en Tulum con uso excesivo de la fuerza.
