Según un artículo del New York Times, un grupo de 226 ingenieros y otros trabajadores de Google han formado un sindicato, llamado Alphabet Workers Union y está afiliado a Communications Workers of America, para asuntos acoso, discriminación y despidos injustificados.
“Nos estamos uniendo – temporeros, proveedores, contratistas y empleados de tiempo completo – para crear una voz de trabajador unificada”, escribieron Parul Koul y Chewy Shaw, presidente ejecutivo y vicepresidente de Alphabet Workers Union.
El Sindicato de Trabajadores de Alphabet “estará abierto a todos los trabajadores de Alphabet, independientemente de la clasificación”, dijeron, y agregaron que la mitad de los trabajadores de Google son temporales, proveedores y contratistas que a menudo reciben salarios más bajos, menos beneficios y tienen menos estabilidad.
El sindicato representa una pequeña minoría de los 260 mil empleados y contratistas de la empresa. Sin embargo, a diferencia de los sindicatos tradicionales, el nuevo grupo no solo negociará contratos, sino que abogará por un entorno laboral más justo. “Nuestro sindicato trabajará para garantizar que los trabajadores sepan en qué están trabajando y que puedan hacer su trabajo por un salario justo, sin temor a abusos, represalias o discriminación”, escribieron Koul y Shaw.
En respuesta a la noticia, la directora de operaciones de personas de Google, Kara Silverstein, dio la siguiente declaración al NYT: “Siempre hemos trabajado duro para crear un lugar de trabajo de apoyo y gratificante para nuestra fuerza laboral. Por supuesto, nuestros empleados tienen derechos laborales protegidos que apoyamos. Pero, como siempre hemos hecho, continuaremos interactuando directamente con todos nuestros empleados”.
Cabe mencionar que uno de los catalizadores en Google para la formación de dicho sindicato fue el reciente despido de Timnit Gebru, un investigador negro de ética de inteligencia artificial y abierto activista de diversidad. La compañía también enfrentó una reacción violenta de los empleados por su participación en un proyecto del Pentágono conocido como Proyecto Maven, que finalmente concluyó.
Fuentes: El Economista/Entrepreneur
