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De sindicatos con padrino, despensas selectivas y despidos legislativos

Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que el rector de la Universidad Tecnológica de Izúcar de Matamoros, Margarito Barbosa Carrasco y el regidor de Gobernación del ayuntamiento izucarense, Sergio Valero Orea, han puesto en marcha una ofensiva para sacar a la FROC de esta institución educativa y quitarle a Francisco Javier Rodríguez Vázquez la representación gremial que hoy tiene de los docentes y administrativos a través del Sindicato Adolfo López Mateos.

Según esta versión la intención de darle caballazo por la vía de la Federación de Trabajadores de Universidades Tecnológicas (FETUT), es que en la UTIM constituyó un sindicato que tiene como secretario general a Raymundo Ceja Vázquez y como secretario del Interior a Óscar Esteban Guerrero Hernández.

El conflicto seguramente seguirá creciendo, ya que la intención de la FETUT es extenderse a otras universidades tecnológicas del estado, cuyos sindicalizados están afiliados a la FROC que encabeza René Sánchez Juárez.

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Que entre los militantes de Morena en Izúcar de Matamoros es creciente el malestar por el reparto selectivo y electorero de despensas del gobierno del estado y el ayuntamiento sólo a determinados grupos de este partido político.

Pero también por el uso del parque vehicular de la Universidad Tecnológica para entregar despensas con productos básicos sólo en ciertas colonias o a operadores políticos del secretario de Educación del estado y presidente municipal con licencia, Melitón Lozano Pérez; del presidente interino Benjamín Hernández Lima, del regidor de Gobernación, Sergio Valero y la síndico municipal Irene Olea Torres.

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Edil de Acatlán se ausentó en plena pandemia y se olvidó del drama de los migrantes en EU

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que una de las autoridades que ha generado el mayor malestar en este periodo de cuarentena por el Covid19, es la morenista María del Carmen Nava Martínez, quien es edil de Acatlán de Osorio y en plena contingencia, se ausentó mucho tiempo de su cargo para supuestamente ir a visitar a su pareja sentimental a Estados Unidos.

Por lo menos eso es lo que cuentan sus detractores y hasta algunos de sus familiares. Su prima Antonia Muñoz es quien ha informado que el viaje de la presidente municipal fue para reunirse con su supuesta pareja sentimental.

Lo que más ha lastimado a algunos sectores de la opinión pública de la Mixteca poblana, es que pese a todas las dificultades, María del Carmen Nava todavía pudo viajar a Estados Unidos y estando en ese país vecino, únicamente se dedicó a atender asuntos de su vida privada y no aprovechó para ponerse en contacto con las comunidades migrantes de poblanos que se encuentran en la unión americana y están sufriendo contagios de Covid–19; falta de empleo y de alimentos; carencia de atención médica y de un creciente miedo de ser deportados por la feroz y discriminatoria política migratoria del presidente Donald Trump.

Durante la ausencia de la edil se generaron algunas crisis en el municipio:

Una de ellas fue un fuerte incendio del centro de confinamiento de desechos de Acatlán de Osorio, que no se pudo sofocar de inmediato y causó un fuerte problema de contaminación.

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Lloran los rectorcitos lloran: adiós a los abusos

Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada Diario Cambio, señala que la educación privada en un gran negocio en Puebla que nadie se había atrevido a tocar hasta que Luis Miguel Barbosa y la mayoría de Morena se decidieron a actuar para terminar con los privilegios de unos pocos mercenarios.

Un negocio en el que los abusos están a la orden del día, y los consumidores, indefensos ante esos abusos. Pero se acabó.

Por eso los rectorcitos integrados al Consorcio Universitario lloran por los rincones. Se les acabó el negocio y ni las manos pudieron meter, pues el nuevo texto ya se aprobó en comisiones y mañana pasa al pleno.

La nueva ley ataca uno de los lados de ese gran negocio llamado educación privada: es un servicio público prestado por entes privados sin ningún tipo de supervisión ni regulación en la relación con los consumidores, es decir con los estudiantes y los que pagan las colegiaturas.

Embelazados en el canto de las sirenas, todos los secretarios de Educación de los últimos años se sentaron a las mesas de los rectores, hicieron negocios con ellos o simplemente se dejaron adular para que la SEP fuera un ente omiso ante sus actos abusivos.

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AMLO, la versión 4T de Elba Esther

Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que ayer la Comisión de Educación en el Congreso local, aprobó una reforma a la Ley de Educación del Estado de Puebla, que es la armonización con la legislación federal, es decir con la ley que AMLO promulgó. La propuesta pretende hacerse del control de las instituciones educativas públicas y privadas, poniendo a todas en el llamado Sistema Nacional de Educación.

Si se analiza el documento se ve el afán burocrático para presionar a las instituciones privadas, llámense escuelas del nivel básico o universidades. De aprobarse en los términos actuales, los diputados permitirán que en casos extremos –como la pandemia que atravesamos- el presidente de la República sea el “Gran Señor Rector” y que cuente con las atribuciones necesarias para regular las colegiaturas y ya sabemos que buscará gratuidad total, olvidando que las instituciones privadas muchas veces superar la calidad académica que brinda el Estado.

Pero los sumisos diputados locales no quisieron escuchar a los rectores de grandes instituciones y en lugar de ello aprobaron en una sesión la armonización federal. Sobra decir que la iniciativa planteada es un copy-paste de la versión federal por lo cual lagunas legales e imprecisiones sobran.

Lo único que los levantadedos, perdón, los legisladores pudieron hacer fue un mal intento para justificar la reforma, señalando que la armonización es lo máximo, aunque en el artículo 105 quede abierta la puerta para que en un momento de locura, como los que acostumbra tener Andrés Manuel anuncie la estatización de la educación, amparado en que todas las instituciones forman parte del Sistema Nacional de Educación.

Hagamos un poco de historia, de 1921 a 1924, José Vasconcelos, coordinó la gran reforma educativa para sacar del analfabetismo a los mexicanos, ya que al menos 80 por ciento no sabía leer ni escribir.

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