El presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, acordaron actuar de manera coordinada para atender las demandas de seguridad de la entidad, al tiempo que rechazaron una disputa por temas partidistas.
Durante la conferencia de prensa matutina de este jueves, en Zapopan, el primer mandatario hizo un llamado a “hacer a un lado las banderas partidistas” y priorizó que “más allá de los intereses de algunos” está el interés del pueblo.
Por su parte, Alfaro Ramírez declaró que no es el momento de llamar a la confrontación y admitió tener diferencias con López Obrador y, aunque recalcó que no son “enemigos”, expresó su desacuerdo a diversas decisiones de la administración.
Externa quejas al presidente
El gobernador de Jalisco acusó que los decretos en materia de generación de energía “echan abajo” la inversión en energías limpias y reprochó que empresas privadas mantienen un proceso contra dicho decreto.
Adelantó una propuesta de recuperación económica tras la pandemia, en el que se insistirá la revisión del pacto fiscal, como lo han propuesto el bloque de gobernadores panistas, lo cual -dijo- es un papel importante en la reactivación.
Además, ante el cuestionamiento de la prensa, aseguró que entregaría al presidente pruebas de la presencia de grupos de choque, ligados a Morena según acusó Alfaro Rodríguez, en las manifestaciones por la muerte de Giovanni, presumiblemente asesinado por policías en Jalisco.
AMLO responde a intelectuales
En otro tema, López Obrador respondió al desplegado publicado por escritores e intelectuales en el que llamaban a crear un “bloque de oposición” para aventajar a Morena en las elecciones de 2021 y acusaron de “autoritario” el gobierno actual.
Al respecto, el presidente´ señalo a los firmantes de “falta de honestidad política” y calificó como “conservadores que fingían ser liberales”, asimismo, afirmó que respondió a la carta ya que es necesario “participar en la vida pública”.
Es de mencionar que uno de los firmantes es el escritor Enrique Krauze Kleinbort, reconocido simpatizante de la administración de Alfaro Ramírez y cuya casa editorial ha recibido pagos del gobierno de Jalisco por promocionarlo.
Al ser cuestionado por la prensa, el mandatario estatal se limitó a decir que “difícilmente puedo opinar de lo que escriban personajes a los que respeto, entre ellos Krauze, (a quien) yo le tengo respeto y aprecio”.
