Saad Hariri presentó su dimisión como Primer Ministro de Líbano tras casi dos semanas de protestas contra la corrupción en el gobierno y la crisis económica que enfrenta el país; a la movilización se le comienza a llamar la “Revolución de Whatsapp”.
Lo que había comenzado como una protesta contra de los planes de cobrar impuestos por las llamadas realizadas en Whatsapp, se convirtió en un reclamo generalizado contra el mal manejo de la crisis, el costo de vida y la falta de empleo y de oportunidades, entre otras cuestiones.
Las manifestaciones comenzaron el 17 de octubre cuando se dio a conocer el anuncio del Ejecutivo de introducir un impuesto a las llamadas telefónicas hechas a través de Whatsapp y otras aplicaciones, la tasa formaba parte de una serie de medidas tomadas para enfrentar la grave crisis económica que atraviesa el país.
Después de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes, el gobierno retiró la propuesta del polémico impuesto, pero las movilizaciones no cesaron.
Todos significan todos
Las manifestaciones continuaron dirigidas a las elites políticas que han dominado al país desde la guerra del 1975-1990, y a quienes muchos acusan de corrupción y mala gestión económica.
“Todos significa todos” ha sido el lema más repetido en las masivas protestas llevadas a cabo en todo el país.
Para apaciguar las protestas, el Consejo de Ministros se reunió con urgencia y aprobó un paquete que incluía una reducción del 50 por ciento del salario a todos los ministros, diputados y otros altos cargos, y la ambición de redactar leyes para “recuperar los fondos saqueados de Líbano”.
Sin embargo, las protestas no solo continuaron, sino que se intensificaron, dejando varios heridos el sábado, e incluso el Ejército se posicionó a favor de la población.
Por lo anterior, el Primer Ministro decidió el martes 29 de octubre renunciar a su cargo.
“Me dirijo al Palacio Baabda para presentar la dimisión del gobierno al presidente, Michel Aoun, en respuesta a los muchos libaneses que salieron a las plazas para pedir el cambio” dijo Hairi admitiendo que el país llegó a un “callejón sin salida”.
Mientras las protestan continúan, este martes grupos gubernamentales leales a Hezbolá y otro grupo chiíta han incendiado campamentos y golpeado a los manifestantes antigubernamentales en Beirut.
Fuentes: BBC / Publimetro / El Español
Editado por Jorge Luna
