De junio a septiembre de 2019, policías estatales y municipales así como militares, fueron agredidos por grupos pobladores de Cañada Morelos, Acajete, San Martín Texmelucan, Tepeaca, Amozoc y Puebla capital, para supuestamente ayudar a criminales.
El primer caso se registró en San Martín Texmelucan el 24 de junio, cuando algunos pobladores de la colonia La Purísima recibieron con piedras a un grupo de militares que realizaban un operativo para inhibir el robo de hidrocarburos en la zona. Los elementos tuvieron que salir del lugar para no enfrentarse con los habitantes.
A los cuatro días, efectivos de la policía auxiliar de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (Ssptm) de Puebla y de la dirección de Comercio Exterior, así como tianguistas de la junta auxiliar de La Libertad se enfrentaron para impedir la detención de un comerciante durante un operativo.
Cuatro días después, se registró un enfrentamiento entre presuntos “huachigaseros” contra efectivos federales y municipales, tras un operativo en la localidad de San José Carpinteros, perteneciente a Tepeaca, lo cual derivó en la detención de 13 personas, entre los que destacó un menor de edad y “El General”, quien el año pasado fue detenido y liberado ilegalmente.
Dos agresiones en un día
En Cañada Morelos, aproximadamente 200 locatarios acudieron al ayuntamiento el 3 de septiembre para exigir la liberación de tres personas que fueron detenidas por el Ejército y la Guardia Nacional (GN), pero al no obtener respuesta retuvieron a 14 policías estatales, quienes fueron liberados casi 15 horas después.
Ese mismo día, hubo una riña entre familias de la colonia San Jacinto, en Amozoc, por lo que al lugar llegaron policías municipales para controlar la situación, pero en respuesta, los civiles terminaron agrediéndolos, dejando un saldo de tres elementos y un poblador muerto.
Por último, el pasado lunes, militares que resguardaban desde del domingo una bodega en Acajete, donde presuntamente se guardan vehículos robados y mercancía diversa, fueron agredidos con armas de fuego por parte de pobladores, azuzados por criminales. Sin embargo, no lograron que el ejército se fuera del lugar.
