Trascendidos intrigosos, maliciosos y desestabilizadores
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que al gobierno de la 4T de Puebla se sumará otro operador electoral, como funcionario de la Secretaría de Administración. Se trata de Miguel Cuauhtémoc Luna Mendoza, quien se desempeñó como director de Organización Electoral del Instituto Electoral del Estado (IEE).
Miguel Cuauhtémoc Luna fue designado director general de Bienes Muebles e Inmuebles, en sustitución de Gerardo Mejía Ramírez.
El ex director de Organización del IEE renunció en mayo de 2018 por diferencias irreconciliables con su entonces jefa, Dalhel Lara Gómez, secretaria ejecutiva del organismo, y porque por esas fechas ya estaba más que comprometido con operadores electorales de la campaña de Miguel Barbosa a la gubernatura de Puebla.
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Que en esa misma Secretaría, la de Administración, logró mantenerse como subsecretario, a pesar del cambio de titular de la dependencia, Juan Pablo Cortés Córdova.
El que fuera representante de Morena y de Miguel Barbosa ante el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) fue designado subsecretario con Salomón Kuri Contreras, y ratificado en el cargo por la nueva secretaria de Administración, María Concepción Lugo Alarcón.
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De diputados independientes a legisladores dependientes
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que para poder llegar a ser legislador en Puebla hay sólo dos vías: una es la postulación a través de un partido político y la otra remar contracorriente por la vía independiente.
En ambas siempre hay un respeto a las reglas del juego sobre todo por quienes llegan al Congreso cobijados por siglas partidistas, precisamente porque fueron esas franquicias las que impulsaron las candidaturas.
Al parecer en el Congreso poblano esas lealtades se perdieron. Desde el 24 de diciembre pasado han pesado mucho más los intereses particulares que los compromisos partidistas.
Lo que ocurre actualmente en el poder legislativo, no debe sorprendernos. Cuatro legisladores que buscan convertirse en una bancada mal llamada Fuerza Independiente deben su postulación al Partido Acción Nacional y a Nueva Alianza. Ellos son Marcelo García Almaguer, Iván Jonathan Collantes, Hugo Alejo Domínguez y María del Carmen Saavedra Fernández.
En 2006 hubo una situación similar, quienes abandonaron el barco al ver que se hundía no eran panistas, sino los priistas, y por supuesto ahí estuvo Rafael Moreno Valle, maestro de estos cuatro, quien les enseñó cómo se puede cambiar de camiseta sin mayor rubor.
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Crece consenso para que Saúl Coronel dirija la CNC poblana
Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, señala que dos certezas que han dominado –en los últimos días– en la Confederación Nacional Campesina del estado de Puebla son: que ha llegado el momento de elegir una nueva dirigencia local y que el aspirante más idóneo para ser el próximo secretario general es Saúl Coronel Aguirre, un experimentado político con una larga trayectoria que abarca ya haber sido diputado local, legislador federal y en un par de ocasiones presidente del sector campesino del PRI.
La CNC poblana pasa por un momento crítico luego de que su anterior dirigente, Maritza Marín Marcelo, excedió el periodo estatutario para el cual había sido electa como secretaria general de la organización y de manera súbita, en mayo de este año, desertó de las filas cenecistas y del PRI, para migrar a la campaña electoral de Morena.
Luego de la salida de Marín Marcelo, en la cúpula nacional de la CNC se estableció que no podía renovarse la dirección de la agrupación agraria hasta que concluyera el proceso electoral extraordinario que este año hubo en Puebla y se renovara la presidencia del Partido Revolucionario Institucional. Ello provocó que en estos últimos meses hubiera un vacío de poder y liderazgo en la Confederación Nacional Campesina.
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El oro negro que dejó AUDI
Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, indica que el huachicol fue el principal negocio que se expandió con pingües ganancias en Puebla, gracias a la llegada de la planta automotriz AUDI.
Desde mover toneladas de tierra en San José Chiapa, lo que implicó miles de camiones que arribaban al lugar abastecidos, en su gran mayoría, con hidrocarburo sacado de los ductos de Pemex.
Se corrió la noticia y todos le entraron al negocio. Unos para perforar ductos, otros en su resguardo en bodegas o camionetas de lugareños y transportistas que hallaron en la gasolina barata, una forma de bajar costos.
Del 2013 hasta la inauguración de AUDI, la industria del huachicol se extendió hasta conformar el llamado “Triangulo Rojo”.
El modelo de negocios se enraizó en la médula ósea de los pueblos con líderes protegidos por autoridades y pobladores.
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AMLO ¿simulador o demócrata?
Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, señala que titánica ha sido la labor que por años han llevado a cabo los asesores de imagen de Andrés Manuel López Obrador, para intentar quitarle la etiqueta de autoritario y anti-demócrata que le han colgado sus enemigos.
Por eso, no se entienden algunas acciones que recientemente han operado quienes ocupan un lugar de privilegio en el círculo más cercano del presidente y que, directa o indirectamente, van en contra de este objetivo.
La necedad de Morena de no respetar los acuerdos legislativos para rotar la presidencia de la mesa directiva en la cámara de diputados, por ejemplo.
Eternizarse en la posición, intentando modificar a modo la ley orgánica de la cámara baja del legislativo federal, no puede considerarse, ni de chiste, una medida siquiera cercana al concepto de “democracia”.
Al contrario.
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El poder de la turba
Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada Diario Cambio, indica que a diferencia de la macabra matanza de Tepexco y Cohuecan, cuando malas decisiones de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) a cargo del vicealmirante Amezaga cobraron la vida de por lo menos cinco linchados, en la crisis de Cañada Morelos ahora sí hubo reflejos, sobre todo desde Gobernación, que permitió la liberación pacífica, sanos y salvos, de los 14 policías que habían sido retenidos por pobladores de la zona, manejados por las bandas de saqueatrenes.
Esta vez no hubo descontrol y sí mucha coordinación desde la planta superior de Casa Aguayo que instruyó a Fernando Manzanilla la negociación con los pobladores, mientras el vicealmirante Amezaga no se durmió en sus laureles y preparó un contingente de 500 agentes —federales, estatales, municipales— para entrar al rescate si fallaban los buenos oficios.
Pero no fallaron: Manzanilla envió a Cañada Morelos a su mejor hombre, el subsecretario José Luis Márquez, quien con paciencia le fue quitando dinamita a una turba que en defensa de tres detenidos —más otros cinco la semana— fueron manipulados por las mafias de saquea trenes que chantajeaban con el linchamiento de los 14 policías.
El objetivo es claro: todas las mafias delincuenciales —llámense saqueatrenes, huachicoleros, huachigaseros— han aprendido a dominar el poder de las turbas como escudo para impedir la aplicación de la ley. Estos pobladores pasaron de ser cómplices pasivos —mirones que volteaban a otro lado ante las ilegalidades— a activos para ganarse unos pesos del lado de los delincuentes.
Lo mismo lo hemos visto en toda la zona de San Martín, que en Tepeaca con los huachigaseros, que en Cañada con los saquetrenes: disfrazados de pueblo bueno, en realidad están del lado de los delincuentes y siempre amenazan con un estallido social. En realidad sólo hacen una defensa de sus intereses ilegales.
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El Columnista que Mató la Trama del Cuñado de Aguilar Camín
Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, señala que parecía un acto de campaña de Enrique “La Fichita” Cárdenas.
Y es que éste habló de pie durante la presentación del “mamotreto” del cuñado de Aguilar Camín.
Todo ocurrió la noche del martes.
Patrocinados por Claudio X. González —el enemigo público número uno del presidente López Obrador—, los autores del libro “La Trama Audi” tuvieron a bien invitar a dos empleados periodísticos del Señor X: Salvador Camarena y Daniel Moreno.
El primero, antiguo amanuense de Felipe Calderón y de Alejandra Sota.
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