Investigadores del Centro Universitario de Rennes, en Francia, comprobó que los refrescos endulzados con aspartame y acesulfame K, conocidos como dietéticos, no provoca problemas con la glucosa ni insulina, relacionados con la diabetes.
Los edulcorantes no calóricos son una gran herramienta para disminuir el consumo de calorías conservando el sabor dulce de los alimentos, pero aún se dudaba sobre el impacto que pudieran tener en el organismo, particularmente en la glucosa, lo que es de interés para quienes padecen diabetes.
Ante esta situación, los científicos realizaron un estudio encaminado a determinar el efecto de bebidas endulzadas con aspartame y acesulfame K, dos poderosos edulcorantes, sobre la secreción de insulina en personas no diabéticas.
Con tal propósito, reunieron a 60 adultos sanos, de los cuales 22 tenían sobrepeso, quienes tomaron dos latas diarias de bebidas carbonatadas por 12 semanas, al terminar fueron suspendidas por un mes, y durante las siguientes 12 semanas, únicamente consumieron bebidas sin endulzantes y sin calorías.
Posteriormente, los expertos midieron la sensibilidad a la insulina de cada sujeto y constataron que esta, así como los niveles de glucosa en sangre, había permanecido estable, independientemente del tipo de bebida.
Incluso, comprobaron que las bebidas con sustitutos de azúcar tampoco habían afectado el tipo de alimentación ni los hábitos de ejercicio de ninguno de los candidatos.
De esta manera, apoyaron la evidencia obtenida en anteriores estudios, los cuales igualmente sugieren que estas bebidas constituyen una gran opción tanto para quienes desean consumir menos calorías como para las personas que sufren de diabetes.
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales
