Luego de que la Fiscalía de Guerrero señalara que Germaín Muñoz García, uno de los dos curas asesinados el lunes, se habría reunido con un grupo delictivo, Andrés Manuel López Obrador pidió investigar el caso antes de criminalizar a los fallecidos.
Lo anterior, tras un mitin en Colima, como parte de su precampaña presidencial, donde sostuvo que se debe indagar en qué condiciones fueron tomadas las fotos en las que, según el fiscal guerrerense, se ve a Muñoz García en compañía de criminales y portando armas de grueso calibre.
“Independientemente de si estaban o no vinculados, estamos hablando de crímenes y de seres humanos y que se requiere que se investigue y se termine con esa violencia”, sentenció el abanderado de la coalición “Juntos Haremos Historia” (Morena, PT y PES).
Asimismo, ante la pregunta de la prensa sobre la implementación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), aseguró que si llega a la Presidencia “vamos a acabar con la corrupción, no en seis años, sino en menos”, sencillamente limpiando “al gobierno (…) de arriba para abajo”.
Respecto a las declaraciones de Antonio Solá, creador de la campaña panista “López Obrador es un peligro para México”, en el sentido de que ya no es tal y ganaría en los comicios del 1 de julio, bromeó señalando que “para unos sigo siendo sectario, un peligro para México; para otros ya me volví fresa, ya casi soy fifi o ñoño”.
Cabe recordar que, durante la madrugada del pasado 5 de febrero, dos sacerdotes y un profesor murieron tras ser atacados por un grupo armado en la carretera Taxco-Iguala, en Guerrero; el Arzobispado de México condenó el crimen y pidió que se haga justicia.
Fuentes: El Debate, Excélsior
Editado por Luis Alberto Palacios
