El pasado viernes, miles de rumanos salieron a las calles de varias de sus ciudades para demandar un cese a la corrupción, asimismo, llamaron a nuevas elecciones, sin embargo, se presentaron más de 400 heridos en un abuso del poder de policías.
Las imágenes de las plazas principales en varias de las ciudades rumanas demuestran lo multitudinarias que fueron las protestas, además de que reflejan uso desmedido de gas lacrimógeno y cañones de agua por parte de las fuerzas de seguridad, quienes en algunos videos se ve cómo golpean a los manifestantes.
Debido a lo anterior, e incluso al enfrentamiento con algunos segmentos de los manifestantes, que pertenecen a equipos deportivos, según confirmó la prensa local, se presentaron más de 400 heridos, entre ellos, dos policías.
En la capital y otras ciudades del país, los rumanos exigieron un alto a la corrupción y, que se convoque a nuevas elecciones.
Acusan falta de oportunidades
Destaca que a este movimiento se sumaron connacionales que trabajan en el exterior y que envían a sus familias las remesas, quienes culpan al gobierno de orillarles a abandonar su país, debido a la falta de oportunidades.
Aunque desde la mañana del viernes la población no ha dejado de tomar las calles, no se ha vuelto a repetir un uso excesivo de la fuerza.
Cabe destacar que no es la primera vez que se manifiestan, pues lo mismo hicieron el año pasado ante la posible salida de la cárcel de políticos acusados de corrupción.
