Eduardo Rivera Pérez, Guillermo Deloya Cobián y Claudia Rivera Vivanco, candidatos del PAN, PRI y Morena a la alcaldía de Puebla, se exhibieron en el debate de la Ibero por los procesos legales que enfrentan, la inexperiencia y la ignorancia en temas de gobierno.
El panista fue señalado de corrupción por aún enfrentar un proceso de inhabilitación por un presunto quebranto al erario en su cuenta pública del 2013, cuando era presidente municipal de la capital.
De la abanderada de la coalición Juntos Haremos Historia se evidenció su falta de experiencia y conocimiento de la administración pública, así como de la situación que guarda el ayuntamiento.
Al priista se le reprochó su inexperiencia en puestos de gobierno y los defectos de las gestiones pasadas de su partido, pero fue el menos atacado por cuestiones personales, así que fue el mejor librado.
En un principio, solo el priísta y la morenista habían confirmado su asistencia al evento de este martes, sin embargo, el panista anunció su participación apenas el lunes y, curiosamente, la institución le sirvió de escenario para que Ernestina García Chávez, la abanderada de Nueva Alianza (NA), declinara a favor de él.
La aliancista tampoco había aceptado acudir ni adelantó que llegaría al sitio, así que únicamente se presentó para renunciar a la contienda y luego se fue, escoltada por personal de seguridad que impidió que fuera entrevistada por la prensa.
Declina aliancista
La candidata que se autodenominaba indígena anunció su declinación, posó para la foto con Rivera Pérez y luego se fue tan rápido como pudo para evadir a los reporteros, ayudada por sus guardaespaldas que empujaron tanto a hombres como mujeres para evitar cuestionamientos.
Tras el hecho, Deloya Cobián y Rivera Vivanco señalaron al presentarse que fue una falta de respeto para los estudiantes el haber “montado un show” en lo que era originalmente un conversatorio.
Seguido de eso, Miguel Calderón Chelius, director de la licenciatura de Ciencias Sociales y moderador, anunció que no sería exactamente sólo un diálogo con alumnos, sino un debate, pues cada candidato tendría dos minutos para presentar una propuesta y sus contrincantes, el mismo tiempo para refutarla y presentar una suya que consideraran mejor.
No hubo temas definidos, cada uno podía hablar de lo que considerara prudente, así que todos los aprovecharon para atacarse mutuamente.
En su primera intervención, Rivera Pérez aseguró que será el “presidente de la seguridad”, pues graduará a 2 mil policías en dos años, pavimentará 3 mil calles e instalará cámaras de vigilancia en patrullas.
Rivera Vivanco calificó esto como una ocurrencia porque señaló que durante el mandato del panista se corrieron a más de mil elementos, solo pudo graduar a 13, así como aseguró que la academia Ignacio Zaragoza puede preparar nada más a 400 elementos al año, por lo que señaló que ella redignificará la situación laboral de los uniformados que hay y equipará el CERI.
Exhibe Rivera desinformación de Claudia
El abanderado albiazul sostuvo que su rival mintió porque en su gobierno graduó a 45 policías, que él no corrió a los elementos, sino que fue el gobierno estatal quien los incorporó a la policía estatal y dijo que estaba “mal informada” porque el CERI ya no existe.
Tras declarar esto, el exalcalde fue vitoreado y aplaudido por una veintena de jóvenes que llevaban pulseras del PAN, que al consultarles reconocieron no ser alumnos de la Ibero, y lo demostraron en varias ocasiones al abuchear, reírse y cuchichear mientras hablaban los aspirantes del PRI y Morena.
En su oportunidad, Deloya Cobián criticó que el perfil albiazul prometa 3 mil calles a pesar de que en su campaña del 2010 promovió pavimentar mil y no cumplió, pues callejones, cuadras y privadas las hizo pasar en su informe de gobierno como si fueran calles.
Recordó también que Rivera Pérez aprobó la “privatización” del agua al firmar en el 2013 el permiso para concesionar el servicio que ahora administra Agua de Puebla en medio de cientos de quejas ciudadanas por el deplorable servicio, razón por la que se comprometió a que el municipio recupere el control del servicio.
Nada de esto fue respondido por el panista y en su réplica anunció que en materia de medio ambiente se sembrarán un millón de árboles y se recuperarán los espacios públicos, acciones que a la vez ayudarán a mejorar la seguridad.
Rivera Vivanco anunció que para combatir la pobreza, en su gestión se atenderán las 17 juntas auxiliares, dotándolas del 30 por ciento de los recursos totales del municipio, pues denunció que actualmente solo se les otorga entre el 2 y el 3 por ciento.
Plantea Claudia recursos a juntas auxiliares
De igual forma, dijo que pugnará por devolverles los registros civiles, que fueron retirados por decreto del exgobernador Rafael Moreno Valle, con anuencia de Rivera Pérez.
En esto coincidió el priísta, quien incluso recordó que el expresidente auxiliar de San Miguel Canoa se convirtió en preso político por oponerse a esta medida.
Esto tampoco fue respondido por Rivera Pérez, al igual que tampoco refutó cuando Deloya Cobián le reprochó haber sido cómplice de la persecución política contra su subordinado.
Le recordó que el propio Rivera Pérez se dijo víctima política de Moreno Valle cuando en el 2016 el Congreso del estado le impuso una inhabilitación de 12 años y una multa de 25 millones de pesos tras detectar un presunto daño patrimonial en su cuenta pública del 2013, sin embargo, ahora que es candidato pasó a ser aliado de su “verdugo” y al parecer “disfruta tener su pie en el cuello”.
Rivera Vivanco retomó el tema exigiendo al panista que “hable con la verdad” y aclare a la ciudadanía que aún no ha sido exonerado de dichas penas y que es abanderado gracias a un amparo.
Rivera evade hablar de su proceso
El aspirante albiazul mostró capturas de pantalla de mensajes de apoyo de líderes priistas, de rectores y hasta de Miguel Barbosa Huerta, actual candidato a la gubernatura por Juntos Haremos Historia, con el fin de señalar que la clase política coincidió en que era un “perseguido político”.
No obstante, evadió reconocer que su proceso legal continúa, pues Deloya Cobián señaló que la resolución emitida por un juez federal el 5 de marzo solo fue para desechar un recurso de la Auditoría Superior del Estado (ASE) porque fue presentado a destiempo, no porque Rivera Pérez sea inocente.
El panista evitó el tema y atacó a sus oponentes criticándolos por no tener experiencia, no haber trabajo en la administración pública, así como carecer de acciones con resultados palpables.
Los alumnos tuvieron la oportunidad de hacer preguntas y las ocuparon para preguntar el costo de sus propuestas, así como su postura sobre el aborto, las uniones homosexuales y la amnistía propuesta por el presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador.
Sin entrar en detalles, los candidatos respondieron que “sí les alcanzará” el presupuesto municipal para cumplir sus promesas, así como se mostraron a favor de los matrimonios igualitarios, pero no del aborto legal, con excepción de Rivera Vivanco, que expresó que cada mujer “debe ser libre a decidir”.
