La prohibición de venta de bebidas alcohólicas en Puebla después de medianoche duraría de tres a cinco meses nada más y empezaría aproximadamente en una semana; la ley será decretada por el alcalde Luis Banck Serrato sin el aval del Cabildo.
Así lo anunció Oswaldo Jiménez López, coordinador de los regidores, quien señaló que el periodo en que aplicará la norma será de prueba, para definir si se elimina, o se aprueba de manera permanente.
Entrevistado este viernes al término de la sesión ordinaria de Cabildo, expuso que tras el descontento que la iniciativa generó en el sector empresarial, se optó porque la prohibición esté sola mente unas semanas.
Cada domingo se realizará una evaluación y, si se detecta que con esta ley sí disminuye la delincuencia, seguiría vigente el siguiente año, de lo contrario, se desecharía.
Al ser por decreto, una vez que Banck Serrato lo firme y se publique, entrará en vigor; de igual forma, cuando lo decida puede cancelarlo.
IP lo avala, afirma
Al respecto, Jiménez López explicó que ya no tendrá que modificarse el Código Reglamentario Municipal (Coremun), como hubiera sucedido en caso de haberse realizado una reforma, pues esta tiene carácter permanente.
En cambio, agregó, el decreto solo tiene vigencia mientras la persona que lo firmó se mantiene en el cargo, es decir, perdería vigencia en 2019 cuando Banck Serrato deje la alcaldía.
El cabildante panista reconoció que con el nuevo carácter de temporalidad las cámaras empresariales –especialmente la Canaco– ya se mostraron más “flexibles”, pues rechazaban la iniciativa por las pérdidas económicas que esta les ocasionará, principalmente a las tiendas que operan las 24 horas.
Incluso, amenazaron con ampararse, pero tras reunirse con los regidores y presentar una contrapuesta, dieron su voto de confianza a la normativa.
Se perderían empleos
De acuerdo con Jiménez López, en el proyecto de la Cámara Nacional del Comercio (Canaco) se planteó aplicar la prohibición solo en unas tiendas para ver cómo funcionaba, pero esto fue rechazado por los regidores, dado que el ayuntamiento no puede aplicar una norma de forma selectiva.
Fue así que se optó por hacerlo mediante un decreto, el cual –estimó- estará listo en una semana para que sea firmado por el alcalde.
Una vez que esto ocurra, el oficio será publicado para que entre en vigor el primer minuto del día siguiente.
Aunque el también presidente de la Comisión de Gobernación reconoció que por un tiempo bajarán considerablemente las ganancias de las tiendas, sostuvo que el beneficio será que bajará la inseguridad.
Incluso, no descartó que se pierdan algunos empleos, pero dijo que hasta el momento las cámaras empresariales no le han presentado formalmente datos al respecto.
