El que dos policías municipales de Puebla hayan sido detenidos presuntamente escoltando a huachicoleros no significa que se deba desconfiar de toda la corporación, justificó la regidora de Seguridad Pública, María De Guadalupe Arrubarrena García.
Los uniformados acusados de ser cómplices de los ladrones de combustible sólo son un par “en un universo de más de mil 600” que conforman la policía municipal, argumentó.
En entrevista, aseguró que todos los oficiales que actualmente se encuentran en funciones aprobaron los exámenes de Control y de Confianza, por lo que la gente “no debe desconfiar de ellos”.
Afirmó que los cadetes vinculados al robo de hidrocarburo ya son investigados por la Fiscalía General del Estado (FGE) y, de ser culpables, serán sancionados.
Sin embargo, insistió en que no se debe criminalizar al resto de los elementos por culpa de los dos que fueron asegurados por policías estatales la noche del viernes en Chachapa, municipio de Amozoc, presuntamente escoltando dos camionetas que transportaban gasolina robada.
No todos hacen lo mismo
Incluso, se refirió a los saqueos y actos vandálicos en supermercados y tiendas de autoservicio a principios de año, los cuales –aseguró- “se pudieron contener gracias al trabajo de los elementos”.
También, recordó que el año pasado fueron dados de baja 52 uniformados por no acreditar las pruebas de control, por lo que insistió en que los que ahora se encuentran en servicio están respaldados por la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (Sspytm), dependencia que evalúa a los elementos.
Arrubarrena García adelantó que para marzo de este año se incorporarán 60 uniformados, a quienes –sostuvo- antes de entrar a la academia se les aplicó la prueba de control, misma que se les repetirá cuando se gradúen e ingresen a la policía municipal.
