Sin Osorio Chong, gobierno federal entrega 5° informe al Congreso. Foto: Animal Político
Sin Osorio Chong, gobierno federal entrega 5° informe al Congreso. Foto: Animal Político

Sin la presencia del presidente Enrique Peña Nieto, ni del titular del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, este viernes Felipe Solís Acero, subsecretario de la Segob, entregó el quinto informe del gobierno federal al Congreso de la Unión.

Como ocurre desde 2006, el Ejecutivo federal no acudió a dicha soberanía este 1 de septiembre, aunque tampoco lo hizo el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), como era usual desde la reforma de 2008 al artículo 69 constitucional, que eliminó la asistencia del mandatario en turno para leer dicho documento.

En contraste, trascendió el arribo de Solís Acero, subsecretario de Enlace Legislativo de dicha dependencia, quien entregó el informe al secretario general de la Cámara Baja, el diputado Mauricio Farah Gebara, en representación de la Mesa Directiva, la cual no se ha podido conformar.

En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, Osorio Chong justificó su ausencia señalando que, “por órdenes del presidente de la República”, se trasladó a Baja California Sur para evaluar los daños causados por el paso de la tormenta tropical Lidia, que dejó al menos cuatro muertos en Los Cabos.

Habría faltado por pugnas en ambas cámaras

Sin embargo, se ha difundido que el secretario de Gobernación declinó acudir al Congreso federal debido a la falta de un acuerdo entre las diferentes bancadas para confirmar al priista Jorge Carlos Ramírez Marín como presidente de la Cámara de Diputados.

Se prevé que la actual presidenta, la panista María Guadalupe Murguía, se mantendrá en ese cargo hasta el 5 de septiembre, fecha límite que establece la ley para que se puedan construir acuerdos sobre la nueva integración del órgano legislativo.

A esta situación, se suma la pugna desatada entre senadores del Partido Acción Nacional (PAN) por la elección, este jueves, del panista Ernesto Cordero Arroyo como presidente del Senado, a quienes sus propios correligionarios acusaron de “traidor” por rechazar el acuerdo, aprobado por Ricardo Anaya Cortés, líder nacional de este partido, para que una mujer del blanquiazul ocupara este puesto.

De acuerdo con los legisladores inconformes, Cordero Arroyo, exaspirante a la presidencia nacional del PAN, pactó el apoyo del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para convertirse en presidente de la Cámara Alta a cambio de su voto a favor del “paso automático” del actual titular de la Procuraduría General de la República (PGR), el priista Raúl Cervantes Andrade, al cargo de fiscal general.